Para los que cocinan regularmente, este es un término muy común. Pero si jamás has escuchado sobre ello, vamos a aclararlo para que puedas comenzar a preparar platos deliciosos.
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El término sofreír hace referencia a una técnica que tiene como objetivo, realzar el sabor de las preparaciones. Si vas a hacer un guiso de carne o verduras, arroz o quieres hacer la base para un pollo al horno, el sofrito es perfecto.
Por lo general, están hechos con verduras picadas finamente: puede ser zanahoria, tomate, papas, pimentones, champiñones, zapallo italiano. También, se agrega cebolla, ajo y caldos para dar más sabor.
¿Cómo se hace un sofrito?
Como ejemplo, vamos a explicarte cómo hacer un sofrito de cebolla, ajo, pimentón y tomate, porque estos suelen ser los ingredientes más comunes.
Tienes que partir todo en trozos muy pequeños, tomar un sartén del tamaño que necesites (dependiendo de lo que harás), agregar aceite de oliva y empezar a freír ligeramente.
La idea es que cada ingrediente vaya soltando su sabor: es importante que comiences agregando los ingredientes secos y por último, los que tienen mayor contenido de agua, como el tomate.
Para que no se queme, el sofrito debe freírse a fuego lento, y lo mejor es que vayas agregando el aceite poco a poco, mientras mezclas. Los condimentos van al final.
Lo principal, es que nunca dejes de revolver, porque así te asegurarás de que tu sofrito tenga la consistencia y la mezcla de sabores perfecta.
Este video explica cada paso detalladamente. Si quieres, puedes basarte en esa receta para tu preparación.