En medio del ruido constante de las redes sociales y los juicios inmediatos, hay gestos que hablan más fuerte cuando se hacen desde el silencio.
Así ocurrió con Eugenio Derbez, quien recientemente fue aplaudido por la manera en la que ha acompañado a su hija, Aislinn, durante uno de los momentos más dolorosos de su vida: la muerte de su madre, la actriz de doblaje Gabriela Michel, ocurrida a finales de noviembre.
Eugenio Derbez viajó hasta México para apoyar a Aislinn Derbez en su duelo
La mañana del miércoles 17 de diciembre, el comediante y productor arribó a la Ciudad de México con un objetivo claro: estar cerca de Aislinn Derbez y brindarle contención en este proceso de duelo. Su llegada al Aeropuerto Internacional de la CDMX no pasó desapercibida y, como suele ocurrir, fue abordado por la prensa.
El productor explicó que, aunque no pudo viajar de inmediato cuando ocurrió el fallecimiento, sí estuvo en contacto constante con su hija desde el primer momento.

En sus palabras quedó claro que el apoyo no siempre se mide en publicaciones o comunicados públicos, sino en presencia emocional real. Aislinn Derbez, aseguró, ha vivido semanas especialmente difíciles, pero se mantiene estable y demostrando una fortaleza admirable.
Uno de los puntos que más llamó la atención fue la reflexión de Eugenio Derbez sobre las críticas que recibió en redes sociales por no pronunciarse públicamente tras la noticia.
Con total franqueza, defendió la idea de que el duelo es íntimo y que la prioridad fue hablar con su hija en privado, no generar contenido para redes sociales. Una postura que muchos no tardaron en aplaudir, pues visibiliza la importancia de respetar los procesos personales.
“Es absurdo lo que la gente quiere y a la gente le importa más, que públicamente te pronuncies, a que yo tuve una llamada con mi hija inmediatamente, pero no lo ando publicando, no voy a decir: ‘Oigan, voy a tener una llamada con mi hija.’ Y pues no, son cosas personales, o hacer un en vivo. La gente que hace eso también la critican porque es exhibicionismo. Entonces, nunca queda uno bien con las redes sociales”.

Así fue como Eugenio Derbez se enteró de la muerte de Gabriela Michel
El actor también aclaró que al momento de enterarse de la muerte de Gabriela Michel se encontraba fuera del país, cumpliendo compromisos laborales previamente adquiridos.
Además, explicó que su relación con la madre de Aislinn Derbez había terminado desde hace muchos años, por lo que consideró que su papel principal en ese momento era acompañar emocionalmente a su hija, algo que sí hizo desde el primer instante.
“De entrada, yo me enteré de esto cuando estaba en el evento. Estoy en Nueva York, o sea, yo ya no tenía una relación con su mamá, ella está casada, tiene un esposo. Yo qué voy a andar saliéndome de un evento que tengo, que ya estoy ahí, para viajar a México. Entonces, pues no”.

Más allá de las explicaciones, lo que realmente conmovió fue su insistencia en recalcar que Aislinn Derbez no ha estado sola.
Según contó, toda la familia se ha mantenido cerca, rodeándola de cariño y apoyo, aunque sin hacerlo público. “No lo publicamos, pero sí la estamos cuidando”, dijo, una frase que resonó entre quienes creen que el amor no necesita likes.
Este gesto cobra aún más relevancia luego de que la propia Aislinn Derbez compartiera en días pasados lo complejo que han sido los últimos meses para ella.
“Está muy apoyada, créeme que ha tenido mucha contención, hemos estado todos alrededor de ella, hermanos, hermanas, toda la familia. Te repito, no lo publicamos, pero sí, estamos cuidándola mucho”.

La actriz confesó que atravesó una serie de cambios importantes en muy poco tiempo: una mudanza, temas laborales, una cirugía postergada por miedo y, por supuesto, la pérdida de su madre. Un torbellino emocional que, aunque doloroso, también ha significado crecimiento personal.
Por ahora, Aislinn Derbez continúa transitando su duelo arropada por su familia, demostrando que incluso en los momentos más oscuros, el sostén emocional puede marcar la diferencia. Y aunque no se vea en redes, está ahí: firme, silencioso y profundamente necesario.

