El caso de Nick Reiner, hijo del cineasta Rob Reiner y de Michele Singer Reiner, no sólo ha conmocionado a Hollywood por la brutalidad de los hechos, sino también por el delicado componente de salud mental que lo rodea. De acuerdo con reportes de medios como TMZ y otros portales estadounidenses, el joven de 32 años fue diagnosticado con una enfermedad por la que se encontraba bajo supervisión psiquiátrica en los meses previos al asesinato de sus padres, lo que lo podría llevar a salvarse de ir a prisión.
Fuentes citadas por TMZ aseguran que, en las semanas anteriores a la tragedia, el comportamiento de Nick se volvió “alarmante” y que las personas de su entorno lo veían cada vez más desorganizado. En ese periodo, los especialistas que lo atendían realizaron ajustes a la medicación con la intención de estabilizarlo, pero, según estas versiones, el cambio no habría funcionado como se esperaba.
Un diagnóstico de esquizofrenia y un tratamiento complejo
De acuerdo con fuentes consultadas por la prensa estadounidense, Nick Reiner recibía atención de un psiquiatra por un cuadro de esquizofrenia y contaba con un esquema de medicamentos para tratar los síntomas. Además de la terapia farmacológica, el hijo del director había ingresado recientemente a un centro de rehabilitación en Los Ángeles especializado en salud mental y abuso de sustancias.
Se trata, según los reportes, de una clínica de alto costo a la que suelen acudir hijos de familias influyentes que buscan atención intensiva. Ahí se habría intentado ajustar su tratamiento para encontrar un equilibrio entre el control de los síntomas psicóticos y los efectos secundarios de los fármacos.
Versiones recogidas por TMZ y otros medios señalan que, entre tres y cuatro semanas antes de la muerte de Rob y Michele Reiner, los médicos modificaron la combinación de medicamentos de Nick. Lejos de estabilizarlo, el ajuste habría coincidido con una etapa en la que se le veía más agitado, desconectado y “fuera de sí”, según la descripción de una fuente anónima.
Los reportes añaden que, paralelamente, el consumo de sustancias por parte de Nick podría haber agravado el cuadro psiquiátrico, dificultando la labor de los especialistas.
¿Nick Reiner no irá a la cárcel debido a su diagnóstico?
De igual manera, a través de una transmisión en TMZ, se informó que Nick Reiner no se declarará culpable, sino al contrario, esto tras el diagnóstico médico de las autoridades.
Hasta el momento no existe seguridad de que el hijo de Rob Reiner pueda salvarse de ir a prisión gracias a este argumento.