Cada año, el Halloween en México tiene un nombre propio: Beliween. La celebración creada por Belinda se ha convertido en uno de los eventos más esperados del año, una mezcla de espectáculo, moda y fantasía donde la cantante despliega toda su creatividad. Inspirada en las grandes fiestas de Halloween de celebridades internacionales como las de Heidi Klum, Belinda ha logrado posicionarse como la reina mexicana del Halloween, consolidando su estatus como un ícono del pop y la moda latina.
Su capacidad para reinventarse y sorprender al público no se limita a su música o a sus proyectos, sino también a su forma de transformar cada disfraz en una declaración de poder y autenticidad. Este 2025 no fue la excepción: la intérprete de Luz sin gravedad apareció convertida en Greta Gremlin, el inolvidable personaje de Gremlins 2: The New Batch (1990). Con su piel verde brillante, labios rojos intensos y un corsé rojo con detalles de leopardo, Belinda dio vida a una versión glamorosa, salvaje y libre del icónico personaje. “Bienvenidos a mi Beliween 2025. Ya saben que esta es mi época favorita del año, quiero que la pasen espectacular, que tomen, que se diviertan y disfruten”, expresó al hacer su entrada triunfal a bordo de un auto clásico.
La familia Peregrín-Schüll: genética, estilo y complicidad
Aunque todos esperaban la gran revelación del disfraz de Belinda, este año sus padres se robaron parte del protagonismo. Fieles asistentes a cada edición del Beliween, Ignacio Peregrín y Belinda Schüll demostraron una vez más que el estilo y la presencia vienen de familia.
Ignacio optó por transformarse en El Pingúino, enemigo de Batman, con lentillas azules y cabello largo, mientras que Belinda Schüll encantó a todos disfrazada de Catrina, con una corona de flores clásica y maquillaje con brillos que completaba su caracterización. Juntos, no solo irradiaron carisma y complicidad, sino que también se ganaron los elogios del público.
En redes sociales, los comentarios no se hicieron esperar: “Belinda es la mezcla perfecta de ambos”, escribió un seguidor. Otros destacaron que “con ese look el papá de Belinda es ella en hombre” y que “los papás de Belinda son perfectos, por eso salió tan hermosa”. La publicación se llenó de mensajes como “bellísima la señora Peregrín” y “genética bendecida”, celebrando no solo la belleza de la familia, sino también la unión que siempre muestran.
Una familia unida que conquista cada escenario
La conexión entre Belinda y sus padres es evidente. A lo largo de los años, han sido su mayor apoyo en cada proyecto y etapa de su carrera, acompañándola en sus giras, eventos y ahora también en sus legendarias fiestas de Halloween. Esta complicidad familiar se ha convertido en una parte esencial del encanto que rodea a la artista.

El Beliween, más que una fiesta, es una expresión del universo creativo de Belinda, donde se mezclan la fantasía, la música y el amor por los suyos. Y si algo dejó claro esta edición, es que el talento, el carisma y el estilo no nacen por casualidad, sino que son parte de un legado familiar que sigue brillando con luz propia.
Porque sí, Belinda puede ser la reina indiscutible del Halloween, pero este año, los verdaderos protagonistas de su reinado fueron sus padres, recordándonos que cuando la genética es tan poderosa, el brillo se hereda.

