La Semana de la Moda de Nueva York sigue siendo uno de los escaparates más comentados a nivel mundial, donde las celebridades no solo acuden a presenciar las propuestas de reconocidas casas de moda, sino que también se convierten en protagonistas con su estilo personal. Tal fue el caso de Lily Collins, quien asistió como invitada especial al desfile de Calvin Klein, atrayendo todas las miradas por el look elegido y la conversación que este desató en redes sociales.
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La actriz de ‘Emily in Paris’ llegó al evento con un conjunto de dos piezas que, fiel al minimalismo elegante característico de Calvin Klein, consistió en un crop top de tirantes ajustado en tono negro y una falda a la cadera con corte recto. El estilismo resaltó su silueta esbelta, apostando por una estética fresca, urbana y sofisticada, en perfecta sintonía con la esencia de la marca estadounidense.
Sin embargo, más allá de los elogios por su elección de moda, lo que más llamó la atención fue la delgadez extrema que la actriz presumió con este atuendo, lo que generó una ola de comentarios y preocupación entre seguidores y críticos de moda. Algunos usuarios en plataformas como X e Instagram señalaron que la hija de Phil Collins lucía demasiado frágil y que su estado físico podría ser reflejo de un desgaste personal.
Lily Collins preocupa por delgadez extrema en desfile de Calvin Klein
Las imágenes rápidamente se viralizaron y las opiniones se dividieron. Mientras que un sector del público aplaudió la sencillez del look y su capacidad para portar un estilo icónico con gran naturalidad, otro sector lanzó críticas crueles hacia su apariencia física, acusándola de promover estándares de belleza poco saludables.
“Está demasiado delgada, deberían cuidar lo que promueven en eventos tan grandes”, “Parece que está recayendo con el trastorno alimenticio, qué triste”, Dios me da la impresión de que aparte esconde la panza para verse más delgada", escribieron usuarios en redes sociales. Otros, en contraste, defendieron a la actriz al asegurar que su constitución siempre ha sido delgada y que no debería ser blanco de comentarios hirientes.
El debate expuso una vez más la sensibilidad del tema de la imagen corporal en el mundo del entretenimiento y la moda, recordando que la Semana de la Moda de Nueva York no solo es vitrina de tendencias, sino también un espacio donde los cánones de belleza son observados con lupa.
Lo que ha dicho Lily Collins sobre la presión de la industria para alcanzar estándares de belleza poco realistas
Cabe destacar que Lily Collins, de 36 años, ha hablado en diversas ocasiones sobre su relación con la autoimagen y la presión de la industria. Incluso ha compartido en entrevistas pasadas que atravesó una etapa complicada respecto a los trastornos alimenticios, situación que superó con ayuda profesional. Por ello, la conversación actual alrededor de su aspecto físico cobra aún más relevancia.
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Más allá de la polémica, lo cierto es que la intérprete brilló con una propuesta sobria y atemporal, acompañada de un peinado liso con raya al medio y un maquillaje natural en tonos tierra, reforzando ese aire sofisticado y elegante que caracteriza a Calvin Klein.
Su presencia en la primera fila del desfile consolidó a Lily Collins como una de las musas favoritas de la moda contemporánea, aunque, esta vez, el protagonismo se inclinó hacia el debate sobre su apariencia, un recordatorio de lo vulnerable que puede ser la exposición pública cuando se trata de la figura femenina.