Cuando El juego del calamar llegó a Netflix en 2021, se convirtió en un fenómeno mundial inmediato. La brutal competencia coreana basada en juegos infantiles, donde perder significa morir, fascinó a millones por su crítica social, su estilo visual impactante y un elenco inolvidable. Pero como suele suceder con los éxitos masivos, mantener el nivel no siempre es fácil.
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Tras el furor de su primera temporada, muchos fans sintieron que la historia comenzó a desinflarse en las temporadas 2 y 3, a pesar de que el creador Hwang Dong-hyuk mantuvo su sello de crítica al capitalismo extremo y la condición humana. Para muchos espectadores, la tercera entrega fue el punto más bajo: alargada, innecesaria y plagada de muertes que, aunque dolorosas, no siempre se sintieron justificadas.
En medio de todo esto, un personaje se convirtió en el blanco del odio de la audiencia: Myung-gi, interpretado por el actor y exidol de K-pop Yim Si-wan.

Este es el personaje que todos están odiando
Introducido en la segunda temporada y desarrollado más a fondo en la tercera, Myung-gi es un exinfluencer de criptomonedas venido a menos que entra al Juego buscando redención o al menos, sobrevivir. Ahí se reencuentra con su exnovia embarazada, Jun-hee, lo que parecía una oportunidad para redimirse. Sin embargo, su evolución va en sentido contrario.
A lo largo de los episodios, Myung-gi pasa de ser un personaje ambiguo a un cobarde despreciable. Traiciona, miente y termina cometiendo uno de los actos más repudiables de la serie. Para Yim Si-wan, dar vida a este personaje fue un reto emocional: “Hasta el último día de rodaje, no sabía si era un villano o simplemente un cobarde confundido”, confesó en entrevista con The Hollywood Reporter.

Lo que sí sabía, según cuenta el actor, era que la reacción del público no sería amable. “El director y yo bromeábamos con que iba a recibir muchos mensajes de odio cuando saliera la temporada. Y no se equivocó”.
Del odio virtual al reconocimiento actoral
Poco después del estreno de la tercera temporada, Yim comenzó a recibir una oleada de mensajes en redes sociales. Algunos amigos le escribieron mensajes entre risas: “¡Eres horrible! ¿Cómo pudiste hacer eso?”, le dijeron. Pero muchos otros comentarios vinieron cargados de enojo auténtico. Yim, sin embargo, ha aprendido a ver lo positivo: “Tengo que aprender a amar el odio”, declaró. “Si el público me odia, entonces hice bien mi trabajo”.
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El actor explicó que interpretar a Myung-gi fue uno de los retos más complejos de su carrera, precisamente porque no era un villano clásico. No tenía un plan maestro, ni poder, ni maldad pura. Era solo alguien egoísta, confundido, y en constante lucha entre el bien y el mal. “Eso lo hace más real… y más fácil de odiar”, dice.
¿Fracaso de personaje o espejo de la sociedad?

La crítica ha sido dura con la última entrega de El juego del calamar, pero hay consenso en que personajes como Myung-gi funcionaron como reflejo de una sociedad que premia la supervivencia a toda costa. Yim Si-wan, con su apariencia de ‘buen chico’ y su actuación matizada, logró que el público sintiera repulsión, lástima y hasta frustración… todo al mismo tiempo.
Aunque muchos aseguran que la serie debió terminar en la primera temporada, no se puede negar que Squid Game sigue generando conversación. Y si algo ha quedado claro con el caso de Myung-gi, es que a veces, odiar a un personaje es la prueba más clara de que fue bien interpretado.