Antes de la trágica muerte de la princesa Diana, su hijo mayor, el príncipe William, le hizo una promesa profundamente conmovedora: devolverle su título real, que había perdido tras el divorcio con el entonces príncipe Carlos, el actual rey.
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La revelación fue hecha por Paul Burrell, exmayordomo y confidente de Lady Di, en su libro A Royal Duty, donde relata uno de los momentos más íntimos entre madre e hijo.
Diana perdió su título tras divorciarse de Carlos
El divorcio entre Diana de Gales y Carlos en 1996 no solo marcó el final de una relación compleja, sino también la pérdida de su estatus dentro de la monarquía británica. Diana ya no podía ser llamada “Su Alteza Real”, un título que simboliza la pertenencia activa a la familia real.
Esto implicaba que debía mostrar reverencia incluso ante su exesposo. Cada vez que se encontraba con el actual rey, Lady Di estaba obligada a inclinar la cabeza en señal de respeto, una situación humillante para una figura tan querida por el pueblo británico.
La promesa de William con tan solo 14 años
Con apenas 14 años, William fue testigo del dolor de su madre y, según el testimonio de Burrell, le prometió que cuando fuera rey le devolvería el título que había perdido.
“Mamá, no te preocupes. Cuando sea rey, te lo devolveré”, habría dicho el joven príncipe.
Lamentablemente, Diana falleció en 1997, apenas un año después del divorcio, y la promesa no pudo cumplirse. A pesar de ello, tanto William como su hermano Harry, pese a las diferencias entre ambos, han mantenido viva la memoria y el legado de su madre a través de acciones públicas y homenajes personales.
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William, al frente de la corona en medio de una crisis
Actualmente, el príncipe William se enfrenta a un momento complejo dentro de la monarquía británica. Su padre, el rey Carlos III, se encuentra enfrentando un cáncer que lo ha mantenido más alejado de la vida pública.
Mientras que su esposa, Kate Middleton, también enfrentó un tratamiento contra el cáncer, por lo que estuvo ausente de la vida pública por un período de tiempo y actualmente mantiene una vida más tranquila y no tan presente en las actividades reales.
En este contexto, William ha asumido un rol más protagónico en la corona, mostrando fortaleza y compromiso mientras honra el legado de su madre, la recordada “princesa del pueblo”.
