Es reconocida mundialmente por su impecable trabajo en exitosas películas como Pretty Woman (1990), Notting Hill (1999), Ocean’s Eleven (2001) o Erin Brockovich (2000), pero Julia Roberts no solo es una de las actrices de Hollywood más famosas, también un icono de la moda.
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De esto último la talentosa estrella de cine dio cuenta este jueves 19 de mayo al acudir a la septuagésima quinta edición del Festival de Cine de Cannes luciendo como el epítome de la elegancia en un look total black con el que se reafirmó como referente de estilo.
Julia Roberts conquista Cannes en un jumpsuit esmoquin
Con un derroche de garbo, seguridad y glamur, la intérprete de 54 años de edad arribó a la alfombra roja de la premier de Armageddon Time, durante el tercer día del festival, enfundada en un elegante y moderno jumpsuit negro firmado por la marca francesa Louis Vuitton.
El traje en el que se enfundó Roberts para asistir al importante evento estaba hecho a su medida con un marcado estilo esmoquin. Y es que el diseño presentaba un escote pronunciado, solapas de muesca en seda, hombreras marcadas, pinzas en la zona de la cintura y una cola clásica de frac.
Bajo la guía de su estilista de cabecera, Elizabeth Stewart, la ganadora del Oscar mantuvo la estética monocromática de la original prenda combinándola solo con un par de minimalistas sandalias de tiras a juego de Rene Caovilla con las que dio pasos de estilo.
En cuanto a los complementos, Julia probó que menos es más al llevar únicamente un deslumbrante collar nuevo de Chopard -marca de la que es embajadora- cayendo sobre su décolletage para agregar la dosis perfecta de lujo y brillo al ensamble monocromático.
De la colección Red Carpet 2022 de la firma, la auténtica pieza statement de joyería fina está elaborada en oro blanco y amarillo ético; adornado con un raro diamante amarillo de más de 100 quilates y engastado con diamantes en forma de pera y cojín.
Por último, la famosa madre de tres completó su sofisticado estilismo llevando su melena rojiza peinada con rizos voluminosos; un elegante maquillaje que realzó su sempiterna belleza natural y una sobria manicura en un tono vino como toque final.
De esta manera, con esta propuesta estilística para su desfile por la red carpet de Cannes, Julia Roberts no solo se veía sensacional, además impuso moda mientras exhibía muy animada su amplia sonrisa.