Salma Hayek dejó a todos boquiabiertos con su participación en la cinta Eternals, en la cual da vida a Ajak, uno de los personajes más poderosos del Universo Marvel.
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En contexto, los “Eternals” son una raza de seres inmortales con poderes sobrehumanos que han vivido en secreto en la Tierra durante miles de años. Ajak es un personaje masculino en los cómics, pero fue re imaginado para ser interpretado por Salma en la película.
La cinta ya se ha convertido en una de las más taquilleras del año no sólo por la forma en la que la historia fue adaptada a la pantalla sino por haber incluido personajes de la comunidad LGBTQ, un personaje que hace uso del lenguaje de señas así como también le dio a actores de origen asiático y latino roles protagónicos. La cinta sin duda logra darle un lugar a distintas culturas que antes no tenían cabida en estas historias.
Salma dijo haber llorado en cuanto vio “su cara morena” en la piel de un personaje como Ajak.
“Me daba mucho miedo el traje, pero no les decía porque no quería que me corrieran”, dijo la actriz en entrevista con Despierta América. “Cuando me lo puse me solté a llorar. Vi mi cara morena. Vi mi cara morena en el traje de superhéroe y al ver mi cara vi tu cara, vi mi cara de niña que tuvo que tener tanto valor para soñar grande. Vi la cara de todas las niñas”., confesó.
La mexicana se ha ganado el reconocimiento a bivel internacional por su carisma, belleza y talento histriónico. Ha representado personajes históricos como Frida Kahlo y se ha convertido en vampiro en From Dusk Till Dawn. Ella ha participado en cintas de acción, drama y comedia, rompiendo estereotipos de lo que es ser una mexicana en Hollywood.
Salma no es ninguna novata en la industria pero a pesar de estar consolidada, tiene que seguir luchando por su lugar en la cima, enfrentándose a quienes no creen en su trabajo ni en lo que representa.
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En redes sociales, los internautas se dedicaron a cuestionarla por sus orígenes pues según dicen, no es lo suficientemente mexicana como para ser una digna representante del país.
“Resulta que Salma Hayek, una mujer millonaria que nació rica, de padre libanés y madre española, representa a los morenos de América. No cabe duda de que para los gringos todo lo que está al sur es México”, expresó un usuario en Twitter.
Además, también circularon comentarios de quienes dicen que “no es lo suficientemente morena”, que siempre fue “privilegiada” e incluso que “nacer en México no la hace mexicana” pues ha vivido mucho tiempo en Estados Unidos, donde obtuvo la nacionalidad estadounidense.
El padre de Salma es Sami Hayek Domínguez, un hombre de origen libanés; dedicado a la política y los negocios; mientras que su madre es Diana Jiménez Medina, de origen español.
Sin embargo, los orígenes extranjeros de Salma son por parte de sus abuelos y bisabuelos. Ella nació en Coatzacoalcos, Veracruz, lo que por ley la hace ser mexicana.
Su familia siempre ha tenido un buen prestigio, lo que le dio a Salma la oportunidad de una educación privada y completa desde muy pequeña. También consiguió un lugar en la televisión mexicana, obteniendo reconocimiento en el medio. Pero nada de eso significa que haya sido un camino fácil.
Salma migró a los Estados Unidos con la esperanza de codearse con los grandes de la industria sin saber que derribaría barreras y abriría paso para otros mexicanos en la industria.
La actriz nunca ha negado sus orígenes, ha hablado de sus abuelos españoles y está casada con un francés. A pesar de que su entorno es una mezcla de costumbres y culturas, ella siempre se ha referido a sí misma como una mexicana orgullosa de su país, lo que la hace una digna representante.
