La tercera temporada de Luis Miguel: La serie marcó el final de aquellas interrogantes que teníamos sobre el cantante. No sólo fuimos testigos del nacimiento de un ídolo sino también, cómo fue que llegó la cima para después tocar fondo y resurgir cual ave fénix para reafirmar su lugar como uno de los grandes de la música.
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Y aunque para los fanáticos Netflix hizo un gran trabajo trayendo a su plataforma la vida del enigmático cantante en tres temporadas, la realidad es que no fue nada fácil convencer a Micky de realizar el proyecto.
Fueron varios los talentos que se sumaron a la serie sin embargo, quien ha dado mucho de qué hablar ha sido Iliana Fox, la actriz que da vida a la productora que convenció al cantante de contar su vida.
En entrevista con Nueva Mujer, Iliana habló sobre su experiencia al dar vida a una de las figuras clave en el resurgimiento de Luis Miguel. “La verdad es que me lo tomé como una bendición, literalmente. Yo soy fan de la serie como muchísima gente entonces me pareció muy emocionante poder participar”, expresó.
La actriz, que tiene una amplia trayectoria en pantalla en telenovelas como Mirada de mujer, el regreso e Imperio de mentiras, confesó lo emocionante que fue compartir escenas con Diego González, caracterizado como el cantante. “Me tocó trabajar con Diego. Tenía muchas ganas de verlo siendo este personaje y tenerlo de frente. Lo disfruté muchísimo. Fue rápido, es una participación especial”.
Aunque la actriz aseveró que fue una pequeña participación, su personaje dio pie al ambicioso proyecto de Netflix. Sin duda, una de las cosas más gratificantes y desafiantes fue tener a la propia Carla González Vargas presente en todo momento, pues no sólo fue quien convenció a Luismi sino que además, está activa dentro de la serie.
“Fue muy divertido. Pude conocer a Carla y platicar con ella. Siempre estuvo presente mientras la estaba interpretando. Ella veía en el monitor todo lo que estaba sucediendo y estaba muy contenta. De repente era extraño porque era como su otro yo. La verdad me sentí muy apoyada, es una tipaza”, confesó Iliana entre risas.
En la tercera temporada de Luis Miguel: la serie vemos dos líneas de tiempo. La primera muestra cómo la popularidad del cantante siguió escalando, entre las oportunidades de darse a conocer en el mercado anglosajón y la decisión de mantenerse fiel al mercado de habla hispana. La segunda línea del tiempo, es la que muestra a un Luis Miguel cansado, endeudado y solitario pero que logró reconectar con su público a través de la música y la serie.
Es en esta línea donde conocemos a Carla González Vargas. “Ella es una mujer muy fuerte, muy empoderada. Es muy linda pero también tiene un carácter fuerte. Es la que realmente convence a Luis Miguel de hacer la serie porque al principio no estaba convencido. Es una mujer muy aguerrida, que habla directo sin dar muchas vueltas”.
La actriz confesó que se sintió muy identificada con ella y que tenerla cerca fue algo muy especial. “Siento que somos muy similares en eso y a veces la gente se saca de onda. No estamos acostumbrados a que nos hablen así. En eso me identifiqué mucho con ella. Estuvo muy padre, sobretodo el tenerla ahí y que estuviera contenta con el resultado”, dijo.
Iliana agregó que le tocó vivir el último día de grabación, algo que agradeció pues “fue la despedida de un proyecto de años de trabajo y esfuerzo”.
Finalmente, al preguntarle sobre la importancia de narrar la historia de Luis Miguel como lo hizo Netflix, la actriz reflexionó sobre lo que este representa para México así como lo sanador que pudo ser exponer lo que vivió.
“Tenemos que aceptar que es un personaje muy importante en este país e internacionalmente. Haber podido lograr que él aceptara contar su vida, una historia que no es fácil, que en momentos no es muy bonita, puede ser cruel. Estás hablando de un ser humano y que tenga la valentía de abrir eso me parece muy bonito. Supongo que fue hasta un proceso sanador para él el poder exponer todas estas cosas”.