Argentina y el mundo entero se enlutaron el pasado 25 de noviembre por la muerte de uno de los deportistas más importantes del siglo XX, Diego Armando Maradona, quien pasó a la historia por sus hechos dentro y fuera de los terrenos de juego.
Justamente en esta segunda faceta, el astro guarda anécdotas que lo hicieron un personaje polémico que divide opiniones. Idolatrado por muchos, odiado por otros más, lo que sí es cierto es que tras su fallecimiento, muchas de estas historias han vuelto a ver la luz.
Maradona faltó a la boda de su hija por un partido de fútbol
Corría el 2018 y el club Fujairah FC, de los Emiratos Árabes Unidos, se jugaba puntos importantes para su pase al ascenso a la máxima categoría del balompié en el país. Su director técnico, el recordado ’10’ argentino, se encontraba presente pero con la mente fuera del recinto deportivo.
En el país sudamericano, a 13.930 kilométros de distancia, su hija mayor Dalma estaba contrayendo nupcias con Andrés Caldarelli y él era el gran ausente por motivos laborales.
O mejor dicho, contractuales. De acuerdo con Soy Carmín, cuando el oriundo de Lanús expresó su deseo de acompañar a su hija se encontró con que sus deberes de peso solo podían ser quebrados por dos razones: muerte o nacimiento de un familiar directo.
Esto obligó a Maradona a permanecer en Dubái para comandar a los suyos frente al Al Arabi, al que finalmente terminó ganando 2-0 y fue uno de sus logros en su carrera como entrenador, llena de altibajos.
Los motivos ocultos
Sin embargo, en aquel entonces fue mucho lo que se dijo de la ausencia del ganador de la Copa Mundial de México 1986, ya que estas especulaciones aseguraron que detrás de estos compromisos como mandamás de la escuadra, había algo más.
Conforme con el citado medio, los rumores indicaron que él se encontraba molesto por la ausencia de Rocío Oliva, novia de Maradona para la fecha, la cual no fue invitada a tal festejo familiar.
A modo de «si no va ella, tampoco yo», presuntamente decidió quedarse a pie de campo, sumado a que en la lista de invitados sí estaban el cineasta Ricardo Darín y el actor Dady Brieva, con los cuales no se llevaba bien, informaron.
No obstante, Dalma Maradona, actualmente con 33 años y actriz de profesión, aclaró que se trató de un acuerdo previo que hizo el delantero con ella previamente.
Sabiendo que no podría asistir a todos los compromisos nupciales, Diego prefirió perderse la boda civil para poder estar presente en el agasajo que se daría en honor a la pareja, la cual en 2019 le dio la bienvenida al mundo en Buenos Aires a su primer retoño: la pequeña Roma.
Otro motivo para escoger esta segunda celebración es que el club emiratí se jugaba un partido de menor trascendencia, así que dejárselo encargado a su asistente técnico no habría significado un problema.
“Hoy es el cumpleaños de mi hija Dalma. No pude estar en su casamiento, pero ella sabe por qué no pude estar. Yo le expliqué a ella y está todo más que bien. Le deseo que sea muy feliz y le mando un beso tan grande como las Islas Malvinas”, escribió en su Instagram dos días después.
Con esto, Diego Maradona demostró que para tener éxito en el mundo profesional también hay que hacer sacrificios personales, un precio que no todos desean pagar para cumplir sus sueños.
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