El príncipe Harry está de vuelta a casa. Después de mudarse con su esposa Meghan Markle y su hijo Archie de 9 meses a la isla de Vancouver en Canadá luego de la decisión de la pareja de abandonar la vida real, el nieto de la reina Isabel fue visto el martes en Edimburgo, Escocia.
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El motivo de la vuelta a su tierra patria es para participar en una cumbre de trabajo en apoyo de su iniciativa de turismo ambiental, Travalyst, en la capital escocesa.
Es la primera visita de manera oficial que hace Harry al Reino Unido desde que él y Meghan Markle decidieran abandonar la familia real para perseguir la independencia y dedicarse a sus propios proyectos.
Harry eligió un método sostenible de viaje: el tren. Llegó a la estación de tren de Edimburgo Waverley, vestido informalmente con jeans y una gorra de béisbol. El padre, de 35 años, también llevaba una mochila verde y llevaba una bolsa de traje.
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Aunque Meghan no estará presente en el evento de Travalyst, ella y Harry tienen varias apariciones en el Reino Unido durante las próximas dos semanas.
La pareja hará su primera aparición conjunta desde su impactante anuncio en los Premios Endeavour Fund el 5 de marzo, seguido de asistir al Festival de Música Mountbatten en el Royal Albert Hall el 7 de marzo.