Dos brazaletes Cartier de diamantes y unos impresionantes pendientes con 432 diamantes negros De Grisogono fueron los accesorios que la reina Letizia para una noche de teatro. Todos quedaron impactados por las joyas que la monarca española utilizó para darle al evento más brillo del esperado.
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Letizia llegó junto al rey Felipe al Teatro Real de Madrid para la apertura de la temporada de ópera, donde disfrutarían de la obra ‘Don Carlo’, de Giuseppe Verdi. Optó por un vestido midi de Lola Li blanco, con un escote en V y solapas tipo blazer.
Las mangas largas y los hombros destacaban su silueta, a pesar de que en esta ocasión prefirió una versión ‘oversize’. Con una falda tipo pareo un poco suelta de la cintura.
Para acompañar el atuendo llevó unos zapatos destalonados, estilo salones con detalles de PVC, de Manolo Blahnik y un bolso de mano negro.
Derroche de glamour
La reina de España ha demostrado en varias ocasiones su gusto por la combinación de blanco y negro, como una forme efectiva de lograr un contraste favorecedor. Sin embargo, en esta ocasión fue la cantidad de diamantes que llevaba encima la que destacó su look.
Los brazaletes y los aretes son parte de la colección de la Corona Española. Las pulseras de diamantes pertenecieron a la bisabuela de su esposo Felipe, la reina Victoria Eugenia, quien la denominó como “joyas de pasar”.
Toda la elegancia fue compensada por un peinado sencillo, al estilo Meghan Markle. Llevó su cabello recogido con mechones sueltos. Utilizó un ahumado bronce en sus ojos, rubor melocotón para sus mejillas y un labial “glossy”.
