Meghan Markle jugó seguro y lució un hermoso atuendo para acudir a la final femenina de Wimbledon. Tras las críticas de la semana pasada por usar jeans, la Duquesa de Sussex optó por una camisa blanca y una falda plisada.
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Meghan se unió a Kate Middleton y a su hermana Pippa para apoyar a su amiga Serena Williams. Las duquesas se mostraron muy animadas y relajadas, dejando a un lado los rumores de peleas entre ambas.
Segura
Medios ingleses informaron que la hermosa falda blanca, con un patrón abstracto en azul y negro, es una midi Boss de 350 libras. La acompañó con una tradicional camisa blanca, que nunca falta en el vestuario de Meghan. Llevó el cabello recogido y con un maquillaje al natural, que le dieron frescura a su limpio outfit.
Amas duquesas lucieron espléndidas en el torneo de tenis. Las miradas se posaron primero en Kate Middleton, que adelantó su llegada pues Meghan asistía a un almuerzo. Llevó un vestido midi verde Dolce & Gabbana.
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Emocionada
La Duquesa de Sussex se sentó junto a Kate en los asientos reales para ver a Williams, quien disputó contra Simona Halep el campeonato. Junto a ellas estaba Pippa Middleton, quien llevó un vestido de flores muy casual y fresco.
Durante el partido se vio a Meghan Markle muy emocionada, aplaudiendo la actuación de Serena. En especial, porque la tenista estadounidense está a solo un partido de igualar el récord femenino por la mayor cantidad de victorias de Grand Slam.