Con su figura intacta, Meghan Markle acudió a las canchas de Wimbledon para ver el partido de su amiga Serena Williams. A la cita sumó dos de sus compañeras más cercanas de la universidad, con quienes estuvo todo el tiempo riendo y charlando.
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A dos días del bautizo de su hijo Archie, Meghan abandonó el protocolo de vestimenta de la monarquía inglesa y se enfundó unos jeans, una camiseta, un saco blanco con línea grises y su distintivo sombrero estilo Panamá.
Feliz
La esposa del príncipe Harry disfrutó al máximo la jornada junto a sus dos amigas de la Universidad Northwestern, Genevieve Hills y Lindsay Roth. Las chicas se sentaron a cada lado de Markle, para comentar sin reserva los detalles del partido que disputaba Williams contra Kaja Juvan.
La tenista norteamericana es una gran amiga, desde hace varios años, de Meghan Markle. De hecho, fue una de las invitadas a su boda con el príncipe Harry y también asistió al baby shower, que le organizaron a la Duquesa de Sussex en New York.
Impecable
La revista Hola México comentó algunos detalles de su outfit, entre ellos el saco blanco con línea grises modelo Brea de L’Agence, que tiene un precio de 550 dólares. En contraste, con el sombrero de Madwell x Baltimore de apenas 58 dólares.
Además, Meghan Markle llevó unas gafas de sol Henrietta Black y zapatos negros altos. Pero el “toque especial” lo llevó cerca de su corazón: un collar con un dije en forma de A para recordar a su bebé. Según la publicación, el accesorio es de la firma Jennifer Meyer y tiene un precio de 278 libras esterlinas.