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A un año de la escandalosa pelea de la reina Letizia y su suegra Sofía, una nueva tensión se vivió entre ellas en la misa de Pascua

Queda más que claro que suegra y nuera no se llevan muy bien

Este domingo de Pascua la familia real española acudió a la Basílica de Santa María de Palma de Mallorca, mismo lugar que fue testigo el año pasado de una tensa pelea entre la esposa del rey Felipe, Letizia y su madre, la reina emérita, Sofía.

Este año la familia real llegó junta en una camioneta, tratando de aparentar que todo marchaba de maravilla, pero la tensión era evidente.

En el lugar llovía un poco, por lo que la reina Letizia tomó un paraguas que le ofrecieron para que caminara hacia la entrada con sus dos hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, dejando atrás a su suegra, sin ofrecerle ningún resguardo bajo la sombrilla.

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La reina emérita trató de sonreír la mayoría del tiempo para demostrar que todo va bien en la familia, pero por momentos se mostraba pensativa, seria, y trató de evitar contacto alguno con sus nietas para que no se repitiera la pelea del año pasado.

Sin embargo, Letizia le dio dos besos a su suegra y hasta le tendió la mano al final de la misa, para redimirse por la situación que protagonizó en la misa de Pascua del 2018.

Pero, su encuentro se vio bastante fingido y estudiado para las cámaras, pues luego la reina emérita Sofía le puso la mano en la espalda a su nuera y trató de sacarle conversación pero no lo logró.

El encontronazo en la misa de Pascua de 2018 entre Letizia y Sofía

El año pasado un momento de mucha tensión se vivió entre la reina Letizia y la reina emérita Sofía, cuando la esposa del rey Felipe trató de interponerse ante una foto que la reina Sofía quería tomarse con sus dos nietas.

 

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