Jennifer Lopez es una de las celebridades latinas más queridas del espectáculo, no sólo por su trayectoria artística sino por la entrega que demuestra hacia su familia. La boricua se ha convertido en un modelo a seguir, pues siempre ha demostrado estar dispuesta a dar todo por sus gemelos Max y Emme, fruto de su relación con Marc Anthony.
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Y aunque las cosas no funcionaron con el salsero, la llamada ‘Diva del Bronx’ ha logrado formar la familia que siempre quiso, al lado del ex beisbolista, Alex Rodriguez. Desde el principio, su relación ha sido muy apasionada y se movieron rápido para vivir juntos y formar una familia con sus hijos. Por mucho tiempo, la cantante fue cuestionada y criticada por su situación amorosa, pero con Alex, Jennifer se ha mostrado más madura y tranquila que en relaciones anteriores, como si se hubiese dado cuenta de que no tiene que estar casada para tener una relación seria y feliz.
Jen y Alex han planeado un futuro juntos, han pensado en hijos y hasta boda pero por ahora, han mostrado estar enfocados en ellos, en sus carreras y la felicidad de sus hijos. La vida tiene que ver con la familia para ambos y sin duda, han dado muchas lecciones sobre cómo lograr el balance perfecto.
Privacidad
Para empezar, ambos son muy reservados sobre su relación. Comunican lo necesario y dejan claro que lo que pasa en casa se queda ahí. Del mismo modo, ambos procuran mantener una buena imagen para sus hijos por lo que buscan estar libres de escándalos en la mayor medida posible. Aunque es común que ambos comparten momentos con sus hijos en redes sociales, nunca muestran situaciones comprometedoras o que puedan representar un riesgo para ellos.
Apoyo mutuo ante todo
Si alguien quiere pasar tiempo contigo, hará tiempo para ti.
No es un secreto que Jen y Alex comparten diferentes aspectos de su vida. Cada uno siempre involucra al otro en sus eventos y presentaciones. Además, siempre se toman un tiempo para disfrutar con sus hijos y solos ya sea pasar la tarde viendo películas en casa, organizando un asado en el jardín o dar un paseo por la playa. En ocasiones, hasta Marc Anthony está presente junto a Jen y Alex en los eventos de sus hijos pues el que estén separados, no significa que no puedan tener una relación cordial. Esto ha ayudado a que sus hijos sepan que siempre podrán contar con sus mayores en las buenas y las malas.
Los hijos del otro no son sus hijos
Al no ser padres de los hijos del otro, hay cierto límite en cuando a sus responsabilidades y forma de tratarse. Lo ideal, es tratarlos como si se tratasen de adultos de modo que puedan fortalecer un vínculo más maduro, de confianza y en algún punto especial.
Paciencia
La regla de oro cuando se trata de lidiar con los hijos de su pareja es la paciencia. Muchos pueden tener una relación distante con los hijos de otros, pero tanto Jen como Alex han logrado que los hijos del otro los vean como alguien de la familia o al menos alguien a quien respetan. Lo importante es llegar a un entendimiento y que ambas partes puedan vivir en armonía.