Subir exageradamente de peso durante y después del embarazo. Ese es el mayor miedo que tiene la duquesa de Sussex y esposa del príncipe Harry, Meghan Markle, luego de conocer que está en estado. Así lo reveló una de sus viejas amigas de Estados Unidos al diario DailyMailTV.
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“Ella sabe que el tipo de cuerpo robusto está presente en su familia, por lo que siempre ha estado aterrorizada de subir de peso”, explicó la supuesta amiga de la exactriz de Suits.
“Cada vez que se sube un poco de peso, se le nota en su rostro, así que quería asegurarse de que iba a estar lista para regresar frente a las cámaras rápidamente cuando era actriz. Ahora que es esposa de un príncipe, creo que debe tener mucho más temor de aumentar de peso”, señaló.
“Es cierto que Meghan acaba de unirse a la familia real, pero siempre quiso ser tratada como una princesa”, añadió la fuente.
La familia de Meghan por parte de padre son personas robustas y con facilidad de aumentar de peso. Eso se evidencia en la contextura de su padre Thomas Markle y en algunas de sus hermanas. El subir de peso lo podría llevar en los genes.
Es normal que en los primeros tres meses del embarazo se gane 0,5 kg. y 1,5 kg. de peso. Ante la información, Meghan Markle podría subir de peso, y es que su estado lo condiciona.
Lo que sí es un hecho es que Meghan tendrá todos los recursos para pagar un nutricionista y un entrenador personal para que la ayudaran a cuidar su figura durante los nueve meses de gestación y después del nacimiento del bebé.