Un pequeño identificado como Craig se encontraba en la multitud de Coventry, donde Kate y William estaban precisamente de visita, cuando Kate logró identificar su rostro percatándose que estaba pálido, alarmada se acercó y solicitó a seguridad una bolsa para el niño pero no fue necesaria.
William también se acercó a un niño llorando para saber qué pasaba. Lo cierto es que la pareja real manifestó su afecto a la multitud.
La pareja planifica otras visitas que podrían acercarlos mucho más al público que los idolatra ¡Siempre se ven impecables!