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60 años del voto femenino en México

El derecho de las mujeres al sufragio marca un avance en el reconocimiento de su participación en la vida política y social del país.

En 1953 fue el año a partir del cual se suscitaron una serie de cambios en los derechos políticos de las mujeres en México. Para entonces prácticamente ellas no ostentaban el título de ciudadanas, y lo asumieron hasta que mediante una reforma en la constitución, se le otorgó el derecho al voto el 17 de octubre del mismo año.

Este acontecimiento se sitúa en el contexto del movimiento internacional por el sufragio femenino (las sufragistas), cuyos antecedentes se remontan al siglo XIX en varias naciones. Esta lucha materializó sus propuestas durante la primera mitad del siglo XX alrededor del mundo; en 1907 en algunos países de Europa y poco antes en Estados Unidos, en 1927 en Uruguay, en 1933 en España.

Sin embargo, en México la igualdad del voto era un asunto que no tenía mucho eco y en el que había seria oposición, a pesar de que existía una aguerrida presencia feminista que surgió después de la Revolución Mexicana; movimiento que contaba entre sus filas a una pionera del feminismo en el país, Elvia Carrillo Puerto (quien además de luchar por el reconocimiento de la mujer en el voto y la política, promovía la libertad sexual, el control natal y el divorcio, la igualdad de género y otros derechos para las mujeres; contando entre sus logros ser la primera diputada).

Entre las condiciones que propiciaron tomar en serio el sufragio femenino en México, indican el hecho de que en 1948 en la Declaración Universal de los Derechos Humanos por la ONU se reconoció el sufragio femenino, y en 1952 haya sido estipulado oficialmente que “Las mujeres tendrán derecho a votar en todas las elecciones en igualdad de condiciones con los hombres, sin discriminación alguna”.

La propuesta de otorgar el voto a las mujeres en México se materializó en el gobierno de Adolfo Ruiz Cortines, siendo finalmente aprobada al hacer reformas a la constitución apuntando este derecho en el artículo 34. Esta nueva legislación se reflejó favorablemente en la numerosa presencia femenina en las urnas el 3 de Julio de 1955, siendo las primeras elecciones donde las mujeres mexicanas participaron. Este evento tuvo una trascendencia instantánea, felicitaciones del extranjero por el notable avance, primeras planas en los diarios nacionales, así como la celebración de un paso hacia la equidad de género en el ámbito político, cuyas consecuencias van más allá del voto, pues significó una puerta adicional para que las mujeres salieran de sus hogares y sus decisiones influyeran en la vida social, y a la vez empezaran a desarrollar actividades diferentes al papel exclusivo que hasta entonces se les asignaba en el entorno machista.

A la distancia este suceso es bastante significativo, puesto que una vez instaurado el voto femenino prácticamente quedó anulada la desigualdad en la participación electoral. Considero que es un ejemplo para que cada vez que sean contempladas nuevas legislaciones a favor de la equidad de género y los derechos de las mujeres sean acatadas efectivamente como la que se realizó hace 60 años. Además del contenido de este suceso (el voto femenino), celebramos la forma en que esta ley ha sido una realidad palpable

¿Qué opinas tú de la trascendencia del derecho al voto de la mujer mexicana?

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