Quince años han pasado desde que Saiko inició su carrera musical. Con un sonido que nos recordaba a esos clásicos temas de Garbage o de Depeche Mode, la banda compuesta por Denisse Malebrán, Luciano Rojas y Rodrigo “Coti” Aboitiz se posicionó rápidamente como uno de los principales exponentes del pop y el synth pop nacional.
Guitarras, teclados y sonidos electrónicos fueron la receta de esta propuesta novedosa, oscura y vanguardista que encantó a un público que hasta hoy los acompaña. ‘Cuando Miro en tus Ojos’, ‘Happy Hour’ o ‘Limito con el Sol’ son sólo algunas de sus canciones que dejaron una huella y marcaron el camino para las generaciones musicales que vendrían más adelante.
Si tú vuelves a “Informe Saiko” en 1999, no escuchabas temas como “La Fábula” en ninguna radio
Luego de tres exitosos discos, Denisse decidió partir para iniciar su carrera como solista. Saiko continuó trabajando junto a una nueva vocalista y un cuarto álbum vio la luz, sin embargo, el público quería de regreso ese sonido único que sólo lograban con Malebrán. Y así fue: en 2012 el trío original volvió a reunirse para alegría de sus fanáticos.
El próximo jueves 22 de agosto, la banda ofrecerá dos conciertos en el Teatro Nescafé para presentar “Trapecio”, su nuevo álbum financiado a través de una campaña crowdfunding en el sitio Ideame, que invita a todos sus fanáticos a colaborar y hacerse parte de la nueva producción. Quisimos hablar con ellos sobre esta novedosa iniciativa, el nuevo disco, sus influencias y sobre la polémica Ley de Propiedad Intelectual.
Cuatro discos de estudio y 15 años de trayectoria, ¿qué es lo que se viene ahora con su nuevo álbum “Trapecio”?
Denisse: Obviamente hay una madurez lógica después de hartos años de trabajo, pero ahora influye el hecho de haber estado un rato sin trabajar juntos. Hay una energía que se concentró en este nuevo trabajo y el resultado que dio nos tiene súper sorprendidos. Hemos logrado hacer un disco de 10 canciones, cada una con una identidad súper marcada. Cada tema tuvo un trabajo especial que dio como resultado un álbum ágil, pop y pegote, el disco más pop que hemos hecho.
Luciano: Fue un proceso muy absorbente, porque teníamos la necesidad de volver con un trabajo potente. La historia de Saiko no es menor en términos discográficos y videográficos… Sabíamos que teníamos que hacer un trabajo bueno como lo hemos hecho siempre. Y como hace tanto tiempo no grabábamos juntos, fue un trabajo muy absorbente emocional y energéticamente, pero que al mismo tiempo nos dejó una gran satisfacción.
Tú escuchas nuestras canciones y sabes que es Saiko
¿Cuáles fueron las principales influencias en este disco?
Denisse: Si bien este disco tiene algo de Depeche Mode y del rock británico que nos gusta, influencias que configuran nuestra marca más oscura, lo que escuchamos ahora fueron cosas más alternativas que nos hicieron volver a la influencia madre. Por ejemplo, escuchamos mucho Air, un disco de hace ocho años atrás. En Saiko existe esa cosa de volver siempre al sonido original. Suena a Depeche, suena a bandas que nos encantan, pero también suena a 2013.
Coti: Suena como Saiko, que ya tiene un sonido característico. Las letras de Denisse, la composición de Luciano, la mía, los arreglos mutuos… Tiene un color que caracteriza a Saiko. Tiene una combinación de mi estilo en las secuencias y teclados y lo que hace Luciano con las guitarras. Tiene un carácter distinto a lo que era antes: un poco lo que fue en un principio, pero en 2013.
Denisse: Lo que quiere decir Coti es que como Saiko fue un grupo de mutación constante, ningún disco suena igual. El paso del primer disco al segundo fue notorio. “Las Horas” también fue muy distinto, con un toque más rockero. Este nuevo disco vuelve a “Informe Saiko”, vuelve al origen, porque empezamos de nuevo a componer los tres. Si tú vuelves a “Informe Saiko” en 1999, no escuchabas temas como “La Fábula” en ninguna radio. Quisimos hacerlo de nuevo, porque ahora no hay ninguna banda sonando así. Es súper arriesgado no sumarse a la moda en la que todos hacen un mismo tipo de música, pero tiene el valor de la identidad. Tú escuchas nuestras canciones y sabes que es Saiko.
Coti: Con respecto a la grabación, hace muchos años que no nos quedábamos 15 días sin distracción haciendo un disco. Fue un encierro, un reality, algo que no vivíamos hace mucho y eso fue nuevo, estar grabando todos juntos y sacar el disco como se hacía antiguamente.
Internet lo cambió todo y uno no puede esperar que la gente se comporte como antes, pero sí hacer valer lo que es de uno.
Respecto a la campaña “crowdfunding” que iniciaron para financiar la producción del disco, ¿qué los llevó a elegir este modo de financiamiento?
Denisse: Una banda tiene que estar en tono, actualizarse y conectarse con lo que está pasando ahora. La forma de mostrarse actualizado tiene que ver con que uno entiende el modelo de industria. Nos pareció lo más lógico hacer participar a nuestro público, ya que un tema importante en nuestra historia son ellos, un público fiel que nos esperó y que provocó esta reunión. Va más allá del tema económico, porque uno se da cuenta lo importante que es para ellos el decir “yo puse 50 lucas de mi bolsillo para ayudar a que este disco fuera posible”, eso es impagable. No tiene que ver con plata, sino con la posibilidad que se le da a los seguidores de ser parte de tu trabajo.
Cambiando de tema, me gustaría saber su opinión sobre la Ley de Propiedad Intelectual que regula los derechos de autor en Chile y las modificaciones a las que fue sometida en 2010, ¿qué les parece?
Denisse: Es un tema complejo. En mi caso hubo un bullying terrible durante muchos años (refiriéndose a su participación por cuatro años en la Sociedad Chilena de Derecho de Autor), de hecho me costó mucho volver a recuperar y dominar mi carrera sin que me maltrataran en las redes. Cuando tú creciste sin tener que pagar nada y te acostumbraste a compartir y consumir, es lógico que cuando llegan y te dicen “esta cuestión hay que pagarla”, produzca rechazo. Por otra parte, es entendible que como artista uno defienda sus derechos, porque la creatividad tiene un valor. La propiedad intelectual reconoce que lo que hizo Luciano es de él y hay que preguntarle si él quiere o no prestarlo o venderlo, algo que es muy difícil de entender para las nuevas generaciones. Lo que importa es que uno tiene el derecho de decidir si una multitienda puede ocupar una de tus canciones con fines comerciales, no con que si no ganaste plata con la venta de discos, porque finalmente lo que queremos es que la gente escuche la música.
No hay ningún interés en fomentar ni en tirar conciencia respecto a la industria artística mientras no sea con el propósito de entretener al pueblo
¿O sea que la ley es positiva pero ha sido mal interpretada?
Luciano: Muy mal interpretada y utilizada, y una de las cosas que faltan es informar a la gente joven, ya que para ellos es algo normal (el uso inadecuado de la propiedad intelectual) y hay que educarlos e informarlos, hacerles entender que no es normal.
Denisse: Tú puedes tener conciencia de lo que está ocurriendo y querer que esto cambie, pero creo que es un error el que uno tenga que camisetearse y andar con la bandera arriba, porque hace mucho daño. Por lo menos en mi caso, se le hizo mucho daño a mi carrera el tener que estar ahí explicándole a la gente y poniendo la cara, cuando no existe conciencia en un país ignorante en temas tan básicos. Imagínate llevarlo al tema del derecho de autor… Es ponerse ahí para que te llegue un palo. Yo creo que un artista debe dedicarse al arte, aunque tienen que preocuparle estas temáticas, pero no por eso prestarse para estar defendiendo todo el tiempo causas, menos una como ésta que es sumamente difícil de hacer entender. Internet lo cambió todo y uno no puede esperar que la gente se comporte como antes, pero sí hacer valer lo que es de uno. Con el derecho de autor uno no defiende la plata, sino su patrimonio.
En un próximo gobierno, ¿qué debería hacerse con respecto a sus derechos como artistas y a lo que ustedes producen?
Denisse: Hay tantas cosas tan o más importante que eso… En políticas culturales hay una laguna que tienes que llegar a cruzar para llegar a interesarte en estos temas. Es una crítica para todos. No hay ningún interés en fomentar ni en tirar conciencia respecto a la industria artística mientras no sea con el propósito de entretener al pueblo, el pan y el circo. En el fondo, en el gobierno de quien sea y ocurra lo que ocurra en materia política, no va a haber un gran cambio, porque somos un país muy retrasado en el sentido cultural.
Para terminar, ¿qué nos pueden adelantar sobre los concierto que ofrecerán el 22 de agosto?
Luciano: El disco nuevo no lo vamos a presentar, vamos a hablar de política, vamos hacer un speech (ríen). No, en verdad vamos a presentar el disco en su integridad junto con lo más importante de nuestra discografía, en la medida que no sea muy latero. Estamos trabajando arduamente en la puesta en escena y gestionando villanos invitados. Va a ser algo bastante entretenido, todo bajo el toque de la calidad que le damos a nuestras cosas. Estarán presentes músicos relacionados con nuestros quince años de carrera. Vamos a invitar a amigos que han tenido relevancia para nosotros y a quienes les tenemos cariño, porque hay una carrera paralela o porque también tiene que ver con la música que hacemos. S