El ambiente festivo de la gran final de “La casa de los famosos” se vio empañado por un enfrentamiento violento a las afueras de Canal RCN. En la noche del 9 de junio, mientras Altafulla se alzaba con la victoria de la segunda temporada del reality, superando a Melissa Gate, la tensión entre los seguidores de los concursantes se desbordó en las calles.
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Fuertes enfrentamientos en la final de ‘La casa de los famosos’
Lo que prometía ser una celebración de la televisión colombiana, con la coronación de un nuevo ganador, se transformó en un escenario de batalla campal. Cuchillos, machetes y piedras fueron las armas utilizadas por un grupo de seguidores de los creadores de contenido que, al parecer, no aceptaron el resultado de la votación o las dinámicas del programa. Este inusitado acto de violencia ocurrió mientras millones de televidentes sintonizaban la gran final, ajenos a la escalada de agresión que se vivía a pocos metros del set de grabación.
La noticia de los altercados no tardó en viralizarse en redes sociales, generando una ola de reacciones. Numerosos internautas rechazaron enérgicamente este tipo de comportamiento, calificándolo de inaceptable y desproporcionado. Muchos se preguntaban “¿hasta qué punto la pasión por un reality puede llevar a estos extremos?” o “¿vale la pena llegar a la violencia por un programa de televisión?”. Otros, en un tono más crítico, cuestionaron la influencia de este tipo de programas en la sociedad y la “adicción a los realities” que puede generar reacciones tan extremas.
La coronación de Altafulla como el ganador de “La casa de los famosos” debió ser el foco de atención de la noche, un hito en su carrera como creador de contenido. Sin embargo, la sombra de la violencia opacó este logro. Este incidente sirve como un recordatorio preocupante de cómo la “fandom” y la devoción por figuras públicas pueden, en casos extremos, degenerar en actos de agresión que ponen en riesgo la seguridad pública y la “convivencia ciudadana”.
