Angelyne es la historia de una estrella de Los Ángeles “famosa por ser famosa”. La despampanante rubia del mismo nombre, llamó la atención por conducir un Corvette rosa y acaparar edificios con deslumbrantes vallas publicitarias en las que aparecía posando de forma sugerente en la década de 1980.
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Estos llamaron la atención de los medios de comunicación locales y pronto recibió varias ofertas para hacer películas, dar entrevistas a revistas y aparecer en programas de televisión.
A veces cantante, a veces modelo, actriz y hasta candidata a la gubernatura de California, Angelyne ha pasado décadas siendo famosa, evitando responder preguntas sobre su misterioso pasado.
Ahora, la nueva serie creada por Nancy Oliver busca revelar mucho más sobre su viaje al estrellato con Emmy Rossum como la encargada de dar vida al extravagante ícono. La producción ya ha sido considerada para tres premios Emmy en las categorías de Outstanding Period Costumes, Outstanding Contemporary Makeup (Non-Prosthetic) y Outstanding Prosthetic Makeup y es que para sorpresa de todos, Rossum pasa completamente desapercibida en sentido de que no hay rastro de ella gracias al increíble trabajo de maquillaje, vestuario y prostéticos que la transforman por completo.
En Nueva Mujer conversamos con Danny Glicker, diseñador de vestuario de Angelyne, quien reveló el desafío que implicó dar vida a una mujer tan enigmática.
“Siempre he creído que los vestuarios son importantes aún cuando no son tan fabuloso y extravagantes como en Angelyne pero especialmente esta serie fue un regalo para un diseñador de vestuario”, aseveró Glicker al preguntarle sobre cómo es que los vestuarios contribuyen en las historias que vemos en pantalla.
“El poder contar la historia de una persona que está tratando de expresar lo profundo de su alma al mundo a través de la forma en la que se ve. Pude inspirarme por la verdadera Angelyne que usaba esta mezcla de vibras de Marilyn Monroe y Barbie. Como diseñador de vestuario pude tomar toda esta información y transformarla en una expresión honesta. Eso es mágico”, agregó.
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Glicker que ha trabajado para varias grandes películas como Ghostbusters: Afterlife, Bad Times at the El Royale, Milk y Up In The Air aseguró que Emmy Rossum lo ayudó en el camino ya que ella “logró entender que todas esas telas eran parte de la verdad que el personaje quería expresar”.
“Emmy fue más que una colaboradora, fue un alma gemela. Decidimos que si íbamos a contar la historia de ésta mujer salvaje pero real, teníamos que hacerlo con gran compromiso”, dijo Glicker. “Me ayudó mucho que Emmy siempre estaba abrazando esta extravagancia”.
En Angelyne, el rosa impera en todas las escenas, incluso si se trata de pequeños detalles pero también hay mucho animal print, estoperoles, incrustaciones de diamantes, cuero y gamuza. “Amo poder llevar mi trabajo con seriedad y tener los colores más bellos y brillos para expresar al personaje. Con Emmy estaba revisando todo constantemente, desde la estructura de la escena hasta el arco emocional de la misma. Este proyecto fue muy inspirador”. El diseñador de vestuario reveló que tuvo la oportunidad de acercarse a piezas reales del armario de Angelyne, lo cual le ayudó a conectar mejor con ella y su historia.
Emmy Rossum sin duda hizo un trabajo espectacular estando detrás de todo ese maquillaje, látex y prótesis. Precisamente uno de los retos más grandes para Glicker fue aprender a trabajar con el cuerpo de la actriz, el cual a su vez “no era de ella”.
“Emmy lleva un cuerpo que constantemente está evolucionando y para mí, trabajar con un cuerpo que no es realmente el de la actriz fue una curva de aprendizaje porque al final es la figura del personaje real”, confesó. “Cuando estaba vistiendo a Angelyne, apenas podía ver a Emmy porque ya tenía entre 4 y 5 horas de maquillaje pero era emocionante”.
Una de las claves de la serie son los saltos en el tiempo, lo que Glicker describió como “la alegría más grande” ya que pudo experimentar con diferentes épocas. “La mayoría de mis looks favoritos son de la época actual porque es cuando se vuelven más coloridos y salvajes. Amo poder mostrar esta evolución de un alma humana y cómo cada vez se vuelve visualmente más asertiva”.
