El Violentómetro es una herramienta gráfica, muy didáctica, que funciona como una regla de colores para ayudarte a visualizar las distintas formas de violencia que pueden ocurrir en una relación de pareja.
Fue creado por la Dra. Martha Alicia Tronco Rosas, de la Unidad Politécnica de Gestión con Perspectiva de Género del Instituto Politécnico Nacional (IPN, México), a partir de una encuesta realizada a más de 14 000 jóvenes entre 15 y 25 años.

La idea detrás del Violentómetro es poner límites, ya que mostrando conductas que a veces no se reconocen como violencia, se facilita que las personas identifiquen cuando algo “no va bien” e impulsa a actuar antes de que la situación escale.
¿Cuáles son sus niveles de violencia?
La regla del Violentómetro está dividida en tres niveles, cada uno asociado a un color:
- Amarillo (“¡Ten cuidado!”): son señales tempranas o menos visibles de violencia, como celos, vigilancia o pequeñas ofensas que ya son una alerta porque la violencia podría aumentar.
- Naranja (“¡Reacciona!”): situaciones más graves, como humillaciones, manipulación emocional, chantaje o control económico.
- Rojo (“¡Necesitas ayuda profesional!”): violencia severa, física o emocional, amenazas, agresiones. En este punto es momento de buscar ayuda inmediata.
Estos niveles ayudan a las personas a tomar consciencia, porque la violencia no se trata solo de golpes, sino de actitudes cotidianas que pueden escalar.

La app del Violentómetro en Ecuador
En Ecuador existe una versión web del Violentómetro, lanzada por UNFPA (Fondo de Población de las Naciones Unidas) Ecuador y USAID (La Agencia de EE.UU. para el Desarrollo Internacional).
En la aplicación, al ingresar se te pide tu edad, género, ciudad (y si tienes alguna discapacidad) antes de comenzar un cuestionario de 25 preguntas, las cuales evalúan conductas de pareja como:
- “¿Te pide la hora a la que vas a volver?”
- “¿Te humilla o te ridiculiza?”
- “¿Te cuestiona la forma en que vistes?”
Puedes responder “sí” o “no”; si respondes afirmativamente, el sistema te da una explicación de por qué esa conducta puede ser violencia, ayudándote a identificar si lo que estás viviendo es realmente abuso.

Además, la herramienta no solo sirve para víctimas: también para personas que deseen reflexionar sobre posibles actitudes propias que son agresivas.
La app incluye videos interactivos sobre la ruta legal para denunciar, un directorio de servicios multisectoriales (organismos de apoyo) y para hombres, un video sobre masculinidades no violentas, invitándolos a reflexionar.
¿Cómo denunciar en Ecuador si estás en una relación violenta?
Si después de usar el Violentómetro sientes que la situación es peligrosa o necesitas ayuda, tienes varias rutas para actuar:
- Denuncia por internet: La Fiscalía General del Estado tiene un formulario en línea para denunciar violencia de género, incluso si eres testigo.
- Atención presencial: Si la agresión es reciente (menos de 24 horas), puedes acudir a una unidad de flagrancia de la Fiscalía.
- Emergencia: Si tu vida o la de alguien corre peligro, marca 911.
- Al presentar la denuncia, recibirás un número de formulario que te permite hacer seguimiento con el Servicio de Atención Integral más cercano.
Una realidad que necesita acción
La necesidad de herramientas como el Violentómetro no es un lujo, sino urgente. Según Fundación ALDEA, entre el 1 de enero y el 15 de noviembre de 2025 se registraron 349 femicidios en Ecuador, lo que equivale a que cada 22 horas una mujer o niña es asesinada.
Estas cifras nos muestran que la violencia de género no solo es más común de lo que se cree, también puede escalar a lo más grave. Tener conciencia desde los inicios, y actuar a tiempo, puede marcar la diferencia.
Un mensaje de esperanza y acción
El Violentómetro es más que una regla, es una linterna que ilumina aquello que puede estar normalizado en nuestra vida diaria. Si al responder las preguntas te das cuenta de que estás en una relación tensa o dañina, eso no es porque tú estés mal, es porque estás ante una forma de violencia que muchas veces pasa desapercibida.
No estás sola. Puedes usar esa herramienta para reflexionar, pedir apoyo y dar el paso para protegerte o proteger a alguien que quieres. Y si decides denunciar, recuerda que hay rutas legales, apoyo institucional, y personas dispuestas a acompañarte.

