Hay publicaciones que se quedan en el corazón. Así fue el mensaje que la comunicadora ecuatoriana Úrsula Strenge que compartió en su cuenta de Instagram. Con una foto al aire libre junto a su hija Camila, ambas acostadas y sonriendo con complicidad, Úrsula escribió:
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“Los atardeceres a tu lado mi princesa son mágicos. Cada suspiro, cada gesto, cada sonrisa, para mí es una victoria. Todos los días agradezco y celebro los esfuerzos que haces por demostrarnos tu fe, paciencia y ganas de vivir. Te amo infinito Camila. Dios está obrando”.
Sus palabras no solo reflejan la profundidad de un vínculo maternal, sino que también son testimonio de lucha, fe y esperanza.
Una madre, una hija y una historia de amor que conmueve
Camila Nogales, de 23 años, sufrió una trombosis venosa cerebral en noviembre de 2024, lo que la llevó a ser sometida a una delicada operación de emergencia en Quito. Después de varios meses de hospitalización, fue dada de alta en abril de 2025. Desde entonces, se encuentra en un proceso constante de rehabilitación.
Graduada de la Universidad San Francisco de Quito, Camila continúa dando pasos firmes hacia su recuperación, rodeada del cariño de su familia y especialmente de su madre, quien no ha dejado de compartir con sus seguidores pequeñas actualizaciones sobre su estado de salud.
Fe, fuerza y familia: el motor detrás de la recuperación
En cada publicación, Úrsula deja claro que no se trata solo de una batalla médica, sino de un proceso emocional y espiritual que ambas atraviesan juntas. Con sensibilidad y gratitud, mostró que detrás de cada sonrisa y cada gesto de Camila hay un triunfo silencioso, pero inmenso.
La expresentadora de televisión, actriz y psicóloga clínica ha sido un ejemplo de fortaleza y amor incondicional. Sus palabras inspiran no solo por lo que dicen, sino por lo que transmiten: la certeza de que el amor de una madre puede acompañar incluso en los momentos más oscuros.
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Una historia que inspira
En tiempos donde las redes sociales a menudo se llenan de filtros y apariencias, Úrsula Strenge se ha convertido en una voz genuina que habla desde el corazón. Su testimonio y el de su hija Camila recuerdan que cada día es una nueva oportunidad para agradecer, abrazar y celebrar la vida.
Porque cuando el amor guía el camino, hasta los días más difíciles se iluminan con la promesa de un nuevo amanecer.
