Conversamos con Rubi Coello, una mujer apasionada que estudió turismo y realizó varios cursos de cocina. Desde hace cinco años trabaja como administradora en CaféLab, donde ha encontrado mucho más que un empleo: ha construido una comunidad.
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“Conseguí este trabajo durante el paro del 2019. Empecé con miedos, como todos al llegar a un lugar nuevo”, nos contó.
Hoy, afirma con una sonrisa que cuando entra a CaféLab, no lo siente como trabajo. Y es que cuando la pasión conecta con el propósito, se transforma en felicidad.
Le preguntamos cómo equilibra sus distintos roles, especialmente el de madre y trabajadora. Ruby nos confesó que su tiempo libre lo dedica con amor a su hijo de ocho años, a su familia y a sus amigas, muchas de las cuales también son sus compañeras de trabajo.
Actualmente vive sola con su hijo, luego de que su madre decidiera viajar a España. Comenta que por lo general comparte tiempo en las noches.
Con una mirada serena pero firme, Ruby compartió un mensaje poderoso para otras mujeres:“Debemos confiar en nosotras mismas y saber que somos capaces de todo lo que nos propongamos”.
Cuando le preguntamos qué le diría a las mujeres que aún no se atreven a dar el salto para empoderarse y ser dueñas de sus vidas, fue clara:“Tenemos una fuerza interior que muchas veces no reconocemos. El miedo nos paraliza, pero hay que hacerlo con miedo. Hay que avanzar igual”.
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Ruby es una joven que a los 15 años decidió dejar el campo y venir a la ciudad con la esperanza de construir una vida mejor.
Poco a poco fue aprendiendo, adaptándose y trazando su propio camino. Hoy se considera una mujer empoderada: independiente, autosuficiente y económicamente estable.
Su historia nos recuerda que la valentía no es ausencia de miedo, sino la decisión de actuar a pesar de él.
