Actualidad

Es momento de dejar de usar el término “feminazi” para describir a una feminista

El movimiento feminista ha estado lleno de malos entendidos y es momento de poner las cosas claras

Entre las marchas de las mujeres y tantos otros eventos masivos bajo el estandarte feminista que están teniendo lugar en todo el mundo,  existe una evidente confusión en torno al tema. Muchas personas siguen sin entender los principios del feminismo y otras, se mantienen escépticas ante la necesidad de estos movimientos.

Sin embargo, lo más alarmante es la indignación que estos provocan, por encima de las injusticias que nos han llevado a las mujeres a alzar la voz. Es decir, para muchos, un monumento o un edificio con pintas, termina siendo más indignante que una violación o un feminicidio, como se ha visto en Latinoamérica. Hay un enfrentamiento constante con quienes defienden las manifestaciones, llamándolas «feminazis», como una forma despectiva y minimizante.  

Es momento de dejar de usar el término «feminazi» para describir a una feminista.

Para empezar, es importante tener claro qué es el feminismo y qué busca. En pocas palabras, el feminismo se trata de que todos los géneros tengan los mismos derechos y oportunidades. De acuerdo con la organización International Women’s Development Agency, el feminismo trata de «respetar las diversas experiencias, identidades, conocimientos y fortalezas de las mujeres, y esforzarse por empoderar a todas las mujeres para que disfruten plenamente de sus derechos»

Recomendados

No es odiar a los hombres ni tampoco ser superiores a ellos. No es una guerra de sexos sino nivelar el campo de juego entre géneros y garantizar que mujeres y niñas diversas tengan las mismas oportunidades en la vida disponibles para niños y hombres. Porque «ser feminista» es creer en la igualdad de derechos para todos los géneros.

Quienes utilizan el término «feminazi» para referirse a una mujer que se manifiesta y que exige sus derechos, no ha entendido el movimiento ni tampoco ve más allá de su privilegio. ¿De dónde viene la palabra?

Es la mezcla entre «feminismo» y «nazismo» y fue inventada por Rush Limbaugh, un conductor de televisión estadunidense del Partido Republicano, con el propósito de denigrar la lucha feminista.

El nazismo es la ideología y prácticas asociadas con el Partido Nazi en Alemania entre 1933 y 1945. Este se caracterizó por ser una ideología fascista, que exaltaba la supremacía de la raza aria y que promovía sentimientos de odio (antisemitismo).

Su máximo exponente Adolf Hitler, responsable de la muerte de millones de personas a quienes consideraba inferiores. ¿En serio se pretende ligar el feminismo a dicha atrocidad histórica? Una cosa no tiene nada que ver con la otra ya que mientras la primera, como bien  se menciona, busca un equilibrio entre géneros. la otra se convirtió en una dictadura que canceló todo tipo de libertades.

Los movimientos feministas son necesarios para todos, especialmente cuando las mujeres seguimos siendo consideradas el «sexo débil», cuando no tenemos las mismas oportunidades que los hombres -especialmente en el campo laboral- y cuando nos matan por el simple hecho de ser mujer (feminicidio).

Sí, el mundo se ha vuelto en un lugar donde tantos hombres matan a tantas mujeres. Donde los que no matan, violan y los que no, los encubren. Hombres que acosan, que consumen pornografía, que ven a la mujer como objeto de placer, que se aprovechan de sus amigas. Pero también están los hombres que no mata ni violan pero sí callan, sí ríen y son indiferentes.  ante un feminicidio y eso también los convierte en parte del problema.

Los movimientos feministas son necesarios para generar un cambio social.  Aunque existen leyes que se supone nos protegen de las injusticias y que velan por nuestros derechos laborales, económicos y de salud, no siempre se cumplen o tienen un montón de trabas que terminan por minimizarnos.

Las mujeres no deberíamos tener miedo de caminar solas a casa en la oscuridad ni tampoco tener que soportar miradas lascivas o toqueteos que no pedimos. No se nos debe llamar «putas» porque somos abiertas sobre nuestra sexualidad ni tampoco deberíamos ser señaladas como incapaces de hacer el «trabajo sucio». No deberían de asumir que todas nacimos para ser madres o para casarnos ni deberían pensar que no podemos tener un mayor poder adquisitivo.

Cada una tiene su idea de plenitud, cada una tiene sus propios objetivos pero quienes tienen estas ideas que van «en contra» de lo «común», son quienes son señaladas como «feminazis», acompañado de otros insultos sobre el físico o el estar «frustradas».

Hay personas que, tanto interna como externamente, no apoyan la idea de que debe haber igualdad de derechos e igualdad de oportunidades para hombres y mujeres. Hay personas que de hecho consideran que ya hemos llegado a la igualdad entre hombres y mujeres.

El feminismo es tan amplio que es para todos. No hay un manual exacto sobre cómo ser feminista pero sí debe quedar claro que debemos desprendernos de los prejuicios prejuicios que hacen que el movimiento se desvirtúe y que se cree una división y una guerra que va en contra de los verdaderos principios feministas.

Más de este tema

Callar, reír o ser indiferente ante un feminicidio te hace parte del problema

¿Por qué las mujeres señalamos el machismo pero seguimos bailando reggaeton?

En México reportan más feminicidios que muertes de mujeres por Covid-19

Te recomendamos en video

Tags

Lo Último


Te recomendamos