Este lunes 3 de septiembre el aún presidente de México, Enrique Peña Nieto, rindió su sexto y último informe de gobierno.
PUBLICIDAD
Como ha sucedido en años anteriores, en esta ocasión se hizo acompañar de invitados especiales, entre los que se encontraba su familia.
En este informe el presidente da a conocer el estado actual del país, que de acuerdo a varias voces de la política mexicana y cifras que lo avalan, deja déficit, violencia, pobreza y corrupción, basta con recordar casos como los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa, el escándalo de la Casa Blanca y los enfrentamientos políticos con el actual presidente de Estados Unidos, para que la opinión pública se vuelque contra el mandatario.
A su último informe de gobierno acudieron su esposa y su hija, Paulina Peña y Sofía Castro, hija de Angélica Rivera. A través de redes sociales trascendieron las imágenes en las que se les ve llorando, situación que no pasó desapercibida en plataformas como Twitter, en donde no tardaron en reprochar la actitud de las jóvenes.
«Lágrimas de cocodrilo» e «hipócritas» son algunos de los mensajes que recibieron.
Presidente Enrique Peña Nieto dio su Sexto Informe de Gobierno, palabras vacías, mentiras, cifras maquilladas, entrega un país destrozado, lleno de sangre, violencia etc. y sus hijos, principalmente Sofía Castro y Paulina Peña sueltan el llanto de cocodrilo 😡😡🙄🙄#6toInforme pic.twitter.com/BFd4zt2rhG
— Ariel Martínez (@ArielMR24) September 3, 2018
Las hijas #Rameras de @EPN #SofiaCastro y #PaulinaPeña lloran por qué se les acabo el “ negocio “ https://t.co/ZDCNljd2PF
— Pedro Quintero Jr (@superquintero27) September 3, 2018
Las críticas hacia Sofía Castro y Paulina Peña
Hace apenas unos días, las jóvenes hijas de la pareja presidencial fueron blanco de críticas luego de que el tatuador Jonboy fuera a la residencia oficial de Los Pinos a realizarles un pequeño tatuaje, situación que fue mal vista en redes pues es conocido como uno de los tatuadores que cobra elevadas cifras por su trabajo.
En su defensa, Sofía señaló que fue un intercambio de amigos, que ella lo invitó a donde vive (Los Pinos), para intercambiar tatuajes.