La 88° edición de los Oscars, la premiación más prestigiosa de la industria del cine, fue una celebración histórica en la que Leonardo DiCaprio se alzó al fin como Mejor Actor tras seis nominaciones durante su carrera.
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El Teatro Dolby de Los Ángeles se llenó de las más brillantes estrellas del cine y, al mismo tiempo, en las redes sociales se especulaba sobre quiénes podrían ser los ganadores.
Como ya todos sabían, la actriz norteamericana Brie Larson, era una de las favoritas para ganar el codiciado premio a Mejor Actriz, pero también tenía una dura competencia con Jennifer Lawrence (Joy), Cate Blanchett (Carol), Charlot Rampling (45 años) y Saoirse Ronan (Brooklyn).
And the Oscars goes to…
Finalmente fue la elegida por su magistral actuación en la película Room (La Habitación). En ella interpretaba a una joven que a los 17 años fue secuestrada y encerrada en un cuarto por un hombre que abusó de ella durante años. Tras estas violaciones nació su hijo, con el que luchó por protegerlo y escapar de allí.
La cinta está basada en un caso real que saltó a la luz en 2008 y que se conoce como la historia del “monstruo de Amstetten”. Allí Larson le dio vida a Joy “Ma” Newsome y para adentrarse aún más en el personaje, según lo que dijeron en la Alfombra Roja de los Oscars, se encerró durante una semana en una pieza, sin tener contacto con alguien, sin bañarse y casi sin comer.
Tras 16 años de carrera, Larson de tan sólo 26 años logró ganar su primer Oscar. Tal vez no es muy conocida en el rubro, pero se inició con pequeñas participaciones en series de televisión que la llevaron hasta hoy.
Sin duda fue su segundo papel protagónico después de la película Short Term 12, la que la llevó a obtener numerosos premios. Su trabajo en Room le hizo ganar el Globo de Oro, el Premio de la Crítica Cinematográfica, el SAG, el BAFTA, el Premio Independent Spirit, y el más preciado Oscar.
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En su discurso dedicó el premio a todo su equipo de rodaje, especialmente al director Lenny Abrahamson y a su pequeño compañero Jacob Tremblay de 9 años, que destacó por ser el más joven que estuvo presente en la ceremonia.
La película también fue nominada al Oscar por el Mejor Director, Mejor Película y Mejor Guión Adaptado, sin embargo, la estatuilla dorada que obtuvo Larson fue la única que se llevó.
