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148 reclusas fueron esterilizadas ilegalmente en cárcel de California

Mujeres comentaron al Centro de Periodismo de Investigación -CIR- que el hecho se habría efectuado entre el 2006 y 2010, años en los que fueron sometidas a la ligación de sus trompas contra su voluntad.

Una noticia tiene a la comunidad norteamericana impactada y es que se filtró la información de que al menos 148 reclusas del Instituto para mujeres en Corona y la prisión “Valley State” para mujeres en Chowchilla fueron esterilizadas ilegalmente por médicos pagados por el Estado.

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Algunas de las reclusas involucradas en el caso fueron entrevistadas por el Centro de Periodismo de Investigación (CIR según sus siglas en inglés), comentando que el hecho se habría efectuado entre el 2006 y 2010, años en los que se sometió a más de un centenar de reclusas a la ligación de sus trompas contra su voluntad. Lo peor es que el CIR informó hoy que podrían haber 100 mujeres más en la lista desde inicios de los 90 y que nunca denunciaron.

Según el sitio norteamericano Slate.com “el gerente médico superior en la Prisión Estatal de “Valley State” entre los años 2005-2008 comentó que las cirugías son una cuestión empoderamiento de las reclusas, dándoles las mismas opciones que las mujeres en el exterior. El sicólogo, Daun Martin, también afirmó que algunas mujeres embarazadas, en particular las drogadictas o sin hogar, cometerían delitos para volver a prisión por un mejor sistema de salud”.

De acuerdo a la investigación de CIR “los médicos bajo contrato con el Departamento de Corrección y Rehabilitación, entre ellos el Dr. James Heinrich, fueron los que hicieron las operaciones fuera de las leyes de California”.

Por otra parte el sitio norteamericano de política Politicususa.com, informa que “en el siglo 21, en uno de los estados más liberales del país, las mujeres fueron obligadas a esterilizarse como animales si los funcionarios de la prisión pensaban que estaban en alto riesgo de volver a la cárcel en el futuro”.

Los médicos habrían recibido cerca de 147 mil dólares por el trabajo, uno de ellos es el Dr. James Heinrich quien defendió las operaciones, argumentando que “para un período de 10 años, no es una gran cantidad de dinero en comparación con lo que se ahorra en el bienestar de pagar por estos niños no deseados”.

Sin duda, todo esto se encuentra en total impunidad. Veremos que hace el gobierno norteamericano con esta grave información filtrada.

Foto:www.cnumc.org 

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