Después de una noche de exceso de alcohol y drogas, la novia de Blake Fielder-Civil encontró a su pareja en cama a punto de asfixiarse con su propio vómito.
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Ahora, el ex esposo de la fallecida Amy Winehouse se debate entre la vida y la muerte mientras está conectado a un respirador artificial. Se encuentra en un coma inducido por los médicos después de que llegara al hospital desmayado por la fuerte ingesta de toxinas. La madre de Blake no se ha separado de su hijo desde que ingresó al hospital.
“Los médicos no tienen pronóstico. Han dicho que le provocaron el coma para ayudarlo. Yo rezo para que él sobreviva, pero también me preparo a mí misma por si no llegara a despertar nunca” , dijo.
Sarah Aspin, su novia, dijo a los medios que se encuentra “destrozada, simplemente destrozada por lo que ha pasado. Sólo quiero llorar todo el rato, pero tengo que estar fuerte por nuestro hijo Jack”.
El padre de Amy también ha comentado sobre la situación y pidió a sus seguidores de Twitter recordar que “Amy lo amaba. Recemos para que se recupere”.
Blake y Amy compartieron una relación muy intensa y amorosa, pero también llena de excesos.