Actualidad

Me titulé y no encuentro trabajo ¿Qué hago?

cómo enfrentar la cesantía juvenil

Dicen que el acceso a la educación superior es clave para encontrar un buen trabajo; muchas familias hacen un gran esfuerzo para que sus hijos puedan estudiar en la universidad o instituto. ¿Pero qué pasa cuando el joven egresa, hace su práctica, se titula pero no encuentra trabajo? Y no encuentra, y no encuentra, y se mete todos los días a todos los punto com relacionados, se lo pone de estado en facebook, en twitter, en Messenger, manda currículums a toda su familia, accede a la bolsa de trabajo de su centro educativo… pero aún así no pasa nada? Ya no es momento de plantearse si lo que se estudió era lo adecuado. ¿Qué se puede hacer entonces?

PUBLICIDAD

Conversamos con Mariana Fagalde, Directora de la Escuela de Psicología de la Universidad del Pacífico, y le hicimos algunas preguntas:

Al momento de elegir qué estudiar ¿Cómo llegar al justo equilibrio entre lo que a uno le gusta, las aptitudes y el campo laboral disponible?¿Cómo asumir que muchas veces no se podrá trabajar en lo que se estudió?

La elección de carrera es tremendamente personal, y está sujeta a las más variadas razones porque depende de la personalidad, de las experiencias y del contexto de quien elije. Para algunas personas es importante el status que otorga una profesión, para otras personas son importantes las tareas cotidianas que se desarrollarán una vez trabajando. Para unas personas es valioso el ingreso económico y para otras la retribución emocional, etc. Sin embargo, es aconsejable acompañar las expectativas personales con una mirada hacia las reales oportunidades que existen para satisfacer esas expectativas. Hoy en día, a través de las múltiples fuentes de información, se puede tener acceso a los datos reales con respecto al estudio y a la ocupación de las carreras que se imparten. Tener información es fundamental para decidir. En ese sentido, es también muy importante tener conocerse a sí mismo: cuáles son mis aptitudes como mis expectativas. Es fundamental evaluar si las expectativas con respecto al futuro laboral son realistas de acuerdo al mercado y de acuerdo a las propias características.

¿De qué forma influye en un joven no encontrar trabajo en lo que estudió?

No encontrar trabajo genera frustración. Sin embargo, en los seres humanos, la frustración puede ser un motor de crecimiento y desarrollo. Grandes iniciativas y emprendimientos surgen de lo que en un momento fueron conflictos y frustraciones. Es importante ser flexible, creativo, y asumir las frustraciones como desafío. Por supuesto que para ello, el entorno emocional y afectivo es importante: contar con apoyo y contención de parte de personas cercanas que junto con acoger el malestar del joven, le transmitan que desde la frustración se pueden generar nuevos emprendimientos, oportunidades y mayor crecimiento personal.

¿Cómo la familia podría ayudar a un joven con este problema? Un joven con título, ¿cuál es el tiempo normal de búsqueda de trabajo en su rubro? ¿En qué tiempo de cesantía es recomendable comenzar a buscar cualquier tipo de trabajo?

Los tiempos son tremendamente personales, y lo importante es detectar cómo está reaccionando la persona. Junto con buscar nuevas oportunidades, en ámbitos distintos a los elegidos inicialmente, es saludable identificar qué aspectos de estos nuevos ámbitos laborales pueden ser enriquecedores para la persona. Quizás un trabajo inesperado, e inicialmente poco deseado, se convierte en una tremenda e inesperada fuente de gratificación. Y al mismo tiempo, es importante buscar satisfacer las expectativas en más de una actividad. Por ejemplo, si encuentro un trabajo que satisface las necesidades económicas, pero no satisface la vocación de servicio, se puede realizar otro tipo de actividad que permita satisfacer esta última, mediante un trabajo de voluntariado por ejemplo. O si no se logran satisfacer las necesidades intelectuales, se pueden desarrollar actividades de este tipo fuera del ámbito laboral, estudiando, investigando, asistiendo a seminarios, etc. En otras palabras, el trabajo no es la única oportunidad para desarrollarse en todos los ámbitos de la vida.

“Estoy trabajando en algo que nunca me imaginé”

Adriana tiene 22 años y estudió Publicidad. Cuando llegó el momento de buscar dónde podía hacer su práctica, se encontró –como muchos- frente a una labor que no tenía exactamente mucho que ver con lo que estudió: debía elaborar informes para clientes del área comercial de un medio de comunicación. “Al principio estaba preocupada de no encontrar práctica, pero cuando  me llamaron de la empresa, acepté, porque me di cuenta que podía aprender mucho. Y cuando me ofrecieron quedarme, también acepté.” En este momento, Adriana continúa acumulando experiencia mientras prepara su tesis de pregrado, para titularse y buscar nuevos rumbos. “Si no encuentro trabajo en una agencia de publicidad, estoy dispuesta a diversificarme en lo free lance, hacer páginas web, o escribir, que es una de las cosas que más me gustan”

Tags

Lo Último