Que no se puede vivir del amor, que el dinero no compra la felicidad. Los dichos pueden guardar mucha verdad, pero no siempre es absoluta. Sin duda, tener algo de plata en el bolsillo nos ayuda a concretar nuestros planes de vida y si tenemos una pareja con la que podamos proyectarnos, tanto mejor. ¿Por qué?
PUBLICIDAD
En ciudades como Santiago adquirir una vivienda es cada vez más difícil, sobre todo para los que recién se integran al mundo laboral y buscan su independencia. Es por esto que compartir los gastos de un departamento o casa, aún desde el pololeo, es una alternativa cada vez más común.
Por lo mismo el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) cuenta con el subsidio de arriendo “Declara tu independencia” para parejas o familias jóvenes de entre 18 y 30 años.
Un estudio realizado por Properati, sitio de búsqueda de propiedades, comparó los datos de arriendo de departamentos en distintas zonas de la capital y la conclusión fue siempre la misma: arrendar dos monoambientes siempre resulta más caro que uno de dos ambientes para compartir.
En Ñuñoa, por ejemplo, si se decide dejar de arrendar 2 departamentos de 1 dormitorio para pasar a convivir en uno de 2, se ahorra un 29% de alquiler. En Santiago Centro el ahorro es algo mayor, mientras que en Las Condes es más económico, pero el beneficio ronda el 20%.
Arrendar un departamento de 3 dormitorios no resulta tan ventajoso en comparación a dos monoambientes. Sólo en Las Condes sigue siendo más económico que rentar dos de un dormitorio.
Así, vemos que convivir puede llegar a ahorrarle a la pareja entre 150 mil y 180 mil pesos por mes.
PUBLICIDAD
Y al margen de la nota, como con este tema no pude evitar ponerme sentimental, les comparto el siguiente poema de Floridor Pérez a los enamorados que cada día luchan por sacar adelante sus sueños:
Le han dicho