Otra versión del popular gazpacho, esta sopa fría que se recomienda en épocas de calor, como las que se viven hoy en el hemisferio sur. El tradicional tomate se une con el color y buen sabor de los aguacates -las también conocidas paltas- para disfrutar como una entrada o para degustar en cualquier momento del día.
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El secreto está en utilizar un buen vinagre para finalizar el proceso de esta sopa, una variedad tan refrescante y que ha pasado por alternativas tan deliciosas como el uso de frutas, pepino, entre otras. ¡Pruébala y disfruta!
Personas|4
Ingredientes
- 3 aguacates maduros
- 2 tomates pequeños
- Medio pepino
- 100 ml de agua
- 2 dientes de ajo
- 100 ml (1 dl) de aceite de oliva virgen extra
- 50 ml (1/2 dl) de vinagre de Jerez
- 4 espárragos verdes cocidos
- Aceitunas negras deshuesadas
- Eneldo
- sal
Cómo preparar un gazpacho de aguacate y tomate
- Preparamos un recipiente grande para una batidora.
- Cortamos a la mitad los aguacates, quitamos la pepita y sacamos toda la carne con una cuchara. La ponemos en el recipiente.
- Pelamos el pepino, lo picamos y lo añadimos al aguacate.
- Pelamos los dos tomates. Uno de ellos lo partimos en cuartos y lo añadimos al aguacate. El otro lo reservamos para el final.
- Agregamos los espárragos cocidos, el ajo picado, la sal, aceite y vinagre. Trituramos todo muy bien con la batidora.
- Vamos añadiendo el agua poco a poco, hasta obtener una crema ligera. En este punto la textura del gazpacho tiene que ser al gusto. Si lo deseas más espeso conviene añadir un poco de miga de pan remojada.
- Servimos en vasos y por encima agregamos el tomate que teníamos reservado picado a dados, las aceitunas negras fileteadas y una pizca de eneldo fresco.
- Servimos bien frío.
Un truco: para mantener su color en perfectas condiciones en dejar dentro del gazpacho la pepita del aguacate después de preparado, porque ayuda a que tenga una oxidación mucho más lenta.
Fuente: Dime que es viernes