El cuerpo es un universo de conexiones nerviosas, sistemas de funcionamiento, sensaciones y emociones que reaccionan de diferentes maneras a los estímulos del día a día.
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La mayoría de los seres humanos tenemos conocimiento y hemos vivido en carne propia los malestares más comunes y pasajeros, o hasta algún padecimiento serio. Pero, ¿qué si te digo que hay enfermedades que ni siquiera te imaginas?
Síndrome de la bella durmiente
También conocido como síndrome de Kleine-Levin, afecta en su mayoría a los adolescentes y algunos lo superan en la edad adulta. Es un trastorno neurológico que produce crisis de sueño prolongado en los que lo padecen.
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Estas personas pueden pasar horas, días y hasta semanas durmiendo, sólo despiertan para atender sus principales necesidades como comer e ir al baño, pero lo hacen en un estado “sonámbulo”. Lo raro es que cuando despiertan, el efecto es como si solo hubieran dormido una noche.
Síndrome de Florencia
O bien, síndrome de Stendhal, sin duda uno de los más extraños que encontré. Este trastorno psicosomático afecta, especialmente, a las personas altamente sensibles ya que involucra el amor al arte.
Es un efecto que surge a partir de la contemplación continua (por muchas horas seguidas) de obras de arte. Un artículo al respecto menciona:
El origen de esta patología, reside en el sujeto que observa el arte, y no en el objeto en sí. La admiración de obras artísticas, tiene multitud de interpretaciones y valoraciones subjetivas que dependen de la cultura de cada persona.
El escritor francés, Henri Beyle, mejor conocido como Stendhal, fue el primero en describir los síntomas durante su visita a Florencia, algunos son: sudoración, palpitaciones, mareos y visión borrosa, sensaciones de euforia, ataques de ansiedad o depresión, según el caso.
Insensibilidad al dolor
Afecta a una de cada 100 millones de personas, y hasta la fecha no se tiene certeza de las causas. Este padecimiento es congénito, y las personas que lo padecen no presentan otros signos de discapacidad, generalmente.
Cualquiera podría pensar que sería genial esquivar los límites del dolor, pero los pacientes aseguran que esta insensibilidad trae muchos riesgos consigo, sobre todo físicos, ya que no pueden reaccionar ante una situación que comprometa su vida.
Existen teorías sobe la causa de este trastorno, una de ellas es la producción excesiva de endorfinas que mantiene al organismo en estado analgésico. Todo se resume a un error en la conexión entre el cerebro y la piel.
La Maldición de Ondina
Suena trágico, pero realmente es de los peores padecimientos que se pueden tener. Medicamente se conoce como hipoventilación alveolar primaria. El problema es que quien la padece no puede olvidarse ni un solo momento de respirar. Es decir, nosotros normalmente tenemos un pequeño episodio de “apneas”, dejamos de respirar de 5 a 10 veces por hora o lo hacemos con menor intensidad.
Sin embargo estas personas, tienen los mecanismos involuntarios dañados y durante el sueño su respiración voluntaria deja de funcionar. Un blog de medicina, menciona:
El problema está en los receptores químicos que deberían recibir la señal (bajada de oxígeno o aumento de dióxido de carbono en sangre) que no llegan a estimular a su vez a los pulmones por alteraciones en los nervios por los que tiene que conducir la información.
Algunos síntomas son la fatiga excesiva, falta de aire, dolor de cabeza o mucho sueño. Y una manera de ayudar a estas personas es a través de respiradores artificiales a los que deben conectarse para poder sobrellevar la enfermedad.
No cabe duda que nuestro organismo es demasiado vulnerable, y que existe un sinfín de cosas a los que estamos expuestos y no tenemos idea, ya sea de manera congénita o no. Lo más grave es que, al no ser tan reconocidas, los diagnósticos llegan demasiado tarde y no hay tratamientos especializados.
¿Conoces alguna otra enfermedad extraña?