Cuando tomas la decisión de vivir sola e independiente económicamente, todo cambia abruptamente. La experiencia siempre es diferente en cada caso, pero lo que nunca cambia es la apertura que se da en automático a los juicios y opiniones de la gente que te conoce y la que no.
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No es nada grave cuando se trata de las personas más cercanas a ti, como tu familia o amigos, porque casi siempre apoyarán tus decisiones o simplemente intervienen con ese amor fraternal y protector que hasta nos hace sentir bien. Pero sabemos que la mayoría de las veces los comentarios vienen de quien menos vela tiene en el entierro, como dicen.
La verdad es que el paso a la independencia es algo de lo que se siente mucho orgullo y responsabilidad. Admito que lo quieres gritar a los cuatro vientos con una emoción tremenda e incontrolable. Lamentablemente no todos lo ven así.
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Hablo de esos personajes mala onda que a la primera oportunidad intentan azotar tu emoción con preguntas tontas y malintencionadas. Pueden venir de donde sea, desde un tipo desconocido hasta de tu misma pareja. O bien, pueden ser las preguntas más inocentes pero son tan repetitivas que pareciera que es parte del paquete de vivir sola.
Estas son algunas de las preguntas/juicios que odiamos que nos hagan o adjudiquen:
“Seguro te saliste de tu casa porque no soportas a tu familia”
Generalmente esta pregunta viene del que ya no se soporta ni a sí mismo. Afortunadamente, esta época se presta a tomar esa decisión por algo más que un conflicto familiar. Además, para la mayoría de los padres, es un orgullo saber que su hijo/a está en búsqueda de su independencia y lo está logrando.
“¿Y si nos reunimos en tu casa?”
El hecho de que vivas sola y tengas un espacio solo para ti, no quiere decir que siempre debas compartirlo. Es muy lindo recibir a las amigas y hacer cenas o fiestas en tu casa, pero eso de que se convierta en la primera referencia para toda reunión es agotador. Sobre todo si al final nadie te ayuda a levantar el desorden.
“Es increíble no tener que pedir permiso ¿no?”
Lo de la familia insoportable y esto, son casi lo mismo. El hecho de vivir sola no quiere decir que seas incapaz de seguir reglas o ser una persona responsable. En muchos casos, si no es que la mayoría, las personas que viven solas se vuelven mucho más conscientes de sus responsabilidades y no es necesario que alguien más se los exija.
“Pero tus papás te ayudan con la renta, ¿o qué?”
Y qué si es así. Aunque yo siempre he creído que no se puede ser independiente a medias, en algunos casos la familia es un gran soporte al principio, y ¿en qué afecta? Digo, una de las ideas es no depender de ellos económicamente, pero qué mejor que tu familia apoye tu decisión y lo demuestre con este tipo de detalles.
“Ese dinero te lo pudiste ahorrar para un coche”
O para cualquier otra cosa. Eso lo escuché demasiadas veces, y hasta llegué a dudar. Pero después de los primeros 2 meses decidí cuáles son mis prioridades, y no hay nada más bonito que ser congruente con ellas.
Por favor comprendan que el acto de salir de casa no significa siempre rebeldía, aunque sé que en ocasiones es así. No significa huir, es más bien empezar a construir tu libertad, un hogar, tu propia personalidad. Si vemos un poco fuera del contexto, realmente es un acto de valor y –en serio—siempre es mucho mejor una muestra de apoyo.
¡Comparte conmigo! ¿Qué es lo que más te preguntan o dicen cuando vives sola?