El queso es en definitiva una de las debilidades de muchos. Es una delicia salada que nos fascina y nos encanta combinar. Pero su descubrimiento podría parecer un tanto misterioso. ¿Cómo es que nuestros antepasados descubrieron un proceso en el que es necesaria la acción de los microorganismos?
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De acuerdo a documentos antiguos, el queso tiene una historia de más de 4 mil años, aunque una leyenda en especial es la que parece tener la clave del misterio.
Nadie sabe quién fue el primero en hacer queso. De acuerdo a una leyenda fue hecho por primera vez por accidente. Para realizar un viaje, un mercader árabe se preparaba para un viaje y decidió guardar leche en el estómago de un cordero, por la practicidad del envase.
Época Greco-romana
Cuando los asiáticos llegaron a Europa, pensaron que ellos habían portado el secreto para elaborar el queso, sin embargo, desde la época griega y romana se elaboraba esta delicia. En La Odisea de Homero, se menciona cómo es que los cíclopes elaboraban el queso. En la mitología griega, se menciona que el queso fue descubierto por Aristeo,
Los romanos disfrutaban ampliamente del queso y no concebían los festines sin una buena rueda de éste. Ellos llevaron la receta a Inglaterra.
Durante la edad media, desde la caída del imperio romano hasta el descubrimiento de América, el queso se hacía y los métodos de elaboración se mejoraban gracias a los monjes de los monasterios. Famosos quesos como el Gorgonzola vieron su nacimiento en uno de ellos, en Italia, en el año 879 después de Cristo.
Italia se convirtió en la capital de la elaboración del queso durante el siglo décimo, por la misma época en la que surgiría el queso Roquefort en Francia. Más allá, sabemos que surgirían muchos tipo de este alimento tan deseado. Francia e Italia tienen más de 400 quesos tradicionales y se dice que en Reino Unido existen más de 700.
Cuando la creatividad se une a la cultura y a algunos accidentes, mucho queso puede surgir. ¿Y a quién no le gusta la idea?
