La llegada del verano me da temor por dos cosas: la primera es el abrasador calor que cae sobre la ciudad, la segunda son las largas jornadas viendo cuál es el bikini indicado para mi cuerpo, que no siempre se encuentra como me gustaría. Podemos hacer horas y horas de ejercicio, sin embargo, si no mantenemos una dieta equilibrada, de poco y nada servirá todo el esfuerzo que hacemos en el gimnasio o en tus rutas de running.
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Comer a las horas adecuadas, dejarse tiempo para darse pequeños gustos y no caer en ataques de ansiedad, entre otros, son los consejos nutricionales que tenemos para ti y para combatir ese rollito que no se va.
Los abdominales se hacen en la cocina
La gran clave para conseguir un vientre plano se reduce a lo que pones en tu boca. La regla 80:20 habla de que debe existir un 80% de dieta y un 20% de ejercicio para notar cambios significativos. No importa lo duro que estés trabajando en el gimnasio si es que eres de las que llega a comer grandes cantidades de carbohidratos. Simplemente no funcionará.
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¿La regla 80:20 o 90:10?
La regla 80:20, que te explicamos arriba, es muy común cuando se trata sólo de una dieta. La mayoría diría que al asegurarse de comer 80% de comida sana, puedes permitirte ser un 20% flexible respecto a chocolates, papas fritas y cosas ricas pero imposibles de compatibilizar con las dietas. Personalmente, creo que debemos tratar de seguir la regla 90:10, es decir que el 90% del tiempo la dieta debe ser estricta y comer para las metas que deseamos alcanzar, y un 10% del tiempo podemos permitirnos algún gusto. Les aseguro resultados.
Cambio de calorías
Hacer circular las calorías implica cambiar la cantidad que consumimos diariamente. Es una gran herramienta para aquellos que buscan eliminar grasa. Permitir que nuestro metabolismo se adapte constantemente a nuestra rutina de dieta evita que nos estanquemos en la bajada. Puedes pasar un día desintoxicandote con jugos detox, al otro consumir proteínas magras, al otro más frutas que verduras y así. La idea es variar siempre.
Consumir grandes cantidades de proteínas
Las proteínas son esenciales cuando se trata de cambiar nuestra composición corporal. Cuando necesitamos perder grasa, una cosa a la que realmente no debemos renunciar es a la cantidad de masa muscular que ya tenemos. Consumir una gran cantidad de proteínas nos ayudará a lograr esto. Una dieta rica en alimentos proteicos, también nos servirá para reducir los niveles de hambre y para generar esa circulación de calorías que te comentamos anteriormente.
Planea tus comidas
La planificación de comidas y su preparación correcta son componentes claves para cambiar nuestra figura. Asegúrate de desayunar de buena manera, con alimentos ricos en proteínas evitando carbohidratos azucarados: te dejarán con hambre para el resto del día.
Hidratación
Mantenerse hidratado es esencial, especialmente en estos días calurosos. El agua te ayudará a suprimir tus niveles de hambre, y líquidos como el té verde y el café tienen grandes capacidades termogénicas, los que ayudarán a mantener equilibrado tu metabolismo y continuar con la quema de calorías.
Come alimentos naturales
Trata de que tus alimentos vengan directamente de la tierra. Si están en un paquete con una lista de ingredientes más larga que tu brazo, procura no consumirlos. Los alimentos reales no requieren una lista de ingredientes, son el ingrediente.
Agrega un poco de sabor
En vez de ahogar tu ensalada en un aderezo llenos de calorías, utilizar algunas especias sabrosas para añadir un poco de sabor. La canela, el jengibre y el ají son grandes alternativa: bajos en calorías y perfectos para acelerar tu metabolismo
Disfruta de la comida
Experimenta con los alimentos que cocinas. Añadir de especias, mucho color, y un montón de verduras te harán mantenerte interesada en seguir con tu dieta. Diviértete con lo que comes y disfrútalo. ¡Recuerda que comer sano es un estilo de vida y no una opción desesperada!