El hombre es el que lleva las riendas del hogar, el hombre es quien debe satisfacer a la mujer, el hombre no muestra sentimientos, el hombre no debe admitir que tiene miedo. Aunque cada vez encontramos estas prácticas más desarraigadas de la sociedad completa, igual quedan resquicios que hacen que las niñas y los niños crezcan con cierta vulnerabilidad a la hora de hablar de su sexualidad.
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Para esto se necesitan dos partes, y si las niñas hemos crecido sintiéndonos muchas veces culpables del placer, siendo catalogadas como promiscuas o interesadas, los niños crecen en un ambiente competitivo, posesivo, violento y perpetrador de actitudes reprochables.
Muchas son las mentiras que rodean al sexo. Hoy hablaremos sobre 10 que debes dejar de decirle a tus hijos, hermanos, sobrinos, o a cualquier pequeño hombre que conozcas:
El tamaño lo es todo
Es una de las mentiras más clásicas y perpetuadas a lo largo de la historia. Lo real es que a algunas personas a veces les importa, pero que obviamente no lo es todo a la hora de encontrar un compañero sexual.
La pornografía ha hecho que cientos de chicos se sientan inferiores debido a los trucos de maquillaje, iluminación, prótesis y ángulos que ocupan en la filmación de estas películas.
El condicionamiento social hace que las personas estén pendientes de esta medida, cuando la verdad es que muy pocas veces responde a la búsqueda de placer físico. Hay muchas y muchos que los prefieren pequeños, delgados, grandes o gruesos. En gustos no hay nada escrito y no se sigue una norma común.
Lo que muchos no saben es que la cavidad vaginal solo mide de 3 a cuatro pulgadas de largo en promedio, expandiéndose durante el sexo , pero tampoco se estira mucho más.
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Este punto es una búsqueda de validación, y responde a características psicológicas más que a elementos fisiológicos significativos.
Los hombres siempre deben estar dispuestos a tener sexo
Cine, telenovelas, literatura y todos los estímulos que reciben los niños desde pequeños, les hacen entender que los hombres siempre deben sentir deseos, y que incluso, la falta de este es más que preocupante.
Sin embargo, muchas veces los hombres y las mujeres no estamos dispuestos para el sexo: la falta de sueño, la dieta, el estrés o la desconfianza pueden afectarnos a la hora de este tipo de encuentros. Mayor deseo sexual no se traduce en una mayor capacidad para tener relaciones sexuales, o mayor disfrute del sexo.
Hay que entender las cosas de esa forma: algunos hombres quieren sexo casual, otros relaciones monógamas, y hay algunos que simplemente no quieren tener sexo. Y esto no debe ser reprochado.
Los hombres no son violados
Las violaciones ocurren en ambos sexos. Hace un tiempo, la Encuesta Nacional Sobre Víctimas (NCVS) realizada en Estados Unidos, comprobó que el 38% de los incidentes de violación y violencia sexual fueron cometidos contra los hombres.
¿Por qué se ha extendido el mito de que los hombres no pueden ser violados? Debido al erróneo pensamiento de que los hombres siempre quieren sexo, y que incluso en un asalto sexual pueden tener una erección. Lo que OBVIAMENTE no significa que estén dispuestos a tener sexo sin consentimiento. La excitación no deseada durante un ataque puede ocurrir tanto a hombres como a mujeres.
Todos los hombres tienen pene
Hoy sabemos que la identidad de género es muy diferente al sexo biológico. El problema existe cuando a los niños se les enseña desde la corporalidad, anulando las demás posibilidades, lo que les da ideas incorrectas sobre sus propios congéneres. Podemos afirmar que la hombría no se define por lo que está entre las piernas.
El sexo es sobre penetración
Muchas encuestas han tenido que aclarar la definición de sexo, pues los jóvenes creen que solo se refiere a la penetración vaginal. Las chicas también cometen este error, declarándose incluso vírgenes, aunque hubiesen practicado sexo anal u oral.
Existen experiencias entre parejas LGBT que no necesariamente requieren de penetración, e igual es sexo. No es llegar y hacer encajar algo como una llave en una cerradura. De hecho, la gran mayoría de las experiencias sexuales van más allá del acto penetrativo.
El porno es una gran manera de aprender sobre sexo
La pornografía existe y existirá siempre, y es maravilloso. Pero es bueno decirle a los chicos que el porno no es sexo real. Requiere esfuerzo cinematográfico y está compuesto por actores, cámaras, exageración desbordante y actividades poco comunes.
Por que claro, en la vida real la gente sí tiene vello y el hombre no puede mantener una erección por horas y horas. Esto se debe dejar claro para que los niños no crezcan creyendo que hay algo malo en ellos por no durar tanto.
De estas películas se pueden sacar grandes y geniales ideas, sin embargo, no es un manual de instrucciones, ver un montón de pornografía no te hará un mejor amante, lo que sí lo hará será conversar con tu pareja sobre los gustos de cada uno.
El sexo termina cuando el hombre termina
El trayecto es más importante que el destino. Creo que las mujeres lo sabemos, pero hay muchos hombres que no consideran el juego previo como algo relevante. Y vaya que lo es. Cuando el hombre termina no significa que todo acabó y que nosotras mágicamente acabásemos también . Chicos, esfuércense y enséñenle esto a sus hijos o a cualquier niño que tengan cerca.
El sexo debe durar horas
Ya lo dijimos. Las jornadas de sexo en la pornografía son maratónicas. De hecho, el sexo, sin el juego previo incluido dura entre 3 minutos a 7 minutos. Así que ya saben, no se sientan mal. Solo den lo mejor de ustedes.
Si dice que no, significa que sí
Tenemos que enseñarle a niños y niñas a ser claros en sus intenciones y que estén conscientes del respeto que deben tener sobre su corporalidad. No significa no. La ausencia de un sí también significa no. Cuando estamos borrachos los sí no son totalmente válidos. La ignorancia que se tiene sobre este tema no debe ser excusa para actos sexuales no deseados. Ser directo y tener las cosas claras siempre será mejor, aunque cuando jóvenes esto nos haga morir de vergüenza.
El sexo oral y el sexo anal son más seguros
Claro, no te harán tener un hijo no deseado, pero aun así se pueden transmitir o recibir un montón de ETS. Diferentes opciones significan diferentes riesgos, no necesariamente la anulación de estos. Lo más seguro es hacerse pruebas regularmente, que tu pareja también tenga estas pruebas, y por sobre todo, utilizar preservativos con parejas ocasionales.
La lista suma y sigue. Aquí solo escogimos los más comunes. En nuestras manos está enseñar bien a nuestros niños, solo así muchas cosas cambiarían, y estas actitudes dejarían de replicarse.
