Si hay un día de tu vida en que puedes ponerte EL vestido espectacular, es el día de tu boda. Casi vale la pena los años de tortura matrimonial sólo por usar el vestido de tus sueños.
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Si lo tuyo es la moda, habrás descubierto antes que yo los vestidos de novia cortos que comienzan a imponerse como tendencia. Son ideales para una novia poco tradicional.
Mientras otra tendencia es usar un vestido de novia rosa o con toques de color, si vas a optar por la versión corta procura que sí sea blanco, para marcar bien la diferencia entre la novia y todas las demás mujeres de la fiesta.
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Aunque quizá lo primero que pensaste es en una ceremonia diurna, estos vestidos también aplican en bodas de noche, en interior o en exterior. Todo estará en el tipo de tela y los accesorios que elijas: uno muy vaporoso o con detalles de encaje queda perfecto con flores en el pelo y un velo de crochet para el día.
Para la noche ¿qué tal uno de seda con un tocado muy chic o un velo corto? Otra idea es usar un velo más largo que el vestido. Si ya vas a salir del tradicional vestido kilométrico que todos pisan que sea para realmente definir tu estilo y tu personalidad.
Puedes incluso mandar a hacer exactamente el mismo vestido, pero en otro color, para tus damas. Los ramos en colores en negativo (por ejemplo, ellas flores blancas y tú, anaranjadas como sus vestidos) completarán un look colectivo muy original.
¿Qué te parece esta tendencia? ¿La usarías?