Algunas veces, lo que parecía ser romance en puerta, se convierte en una tortura. Ambos se despiertan del sueño y descubren cada uno los defectos del otro cuando se topan con la inevitable convivencia.
PUBLICIDAD
Sin embargo, en una relación existen altas y bajas. Se sabe que no todo puede ser miel sobre hojuelas. Pero eso sí: pelear demasiado puede desgastarlos a ambos como pareja (y, desde luego, alejarlos).
Lo mejor es, más que tolerar al otro, entender que ninguno de los dos puede tener la razón. No se trata de tener la misma opinión, sino de que, de alguna forma, puedan acordar que no están de acuerdo:
Recomendados
Espacios inclusivos para un futuro sostenible: el papel crucial de la diversidad en las empresas
15 nombres de niña que empiezan con “A”: todos son bonitos y esconden un profundo significado
Cuatro formas de incluir colágeno en tu rutina de belleza y lograr buenos resultados
1. Escucha
A veces nos cuesta trabajo abrir nuestras opiniones a nuevas ideas. Y no aplica exclusivamente dentro de una relación de pareja, sino de ser flexibles a enriquecernos por lo que pensamos.
Sí, no es fácil y muchas veces creemos tener la razón (e incluso, algunas veces, la tenemos). Pero con un poco de paciencia y crédito para el otro, no será cosa del otro mundo.
2. Respira
Hay que aceptarlo: a veces llegan los gritos. Sí, llegan las peleas y no tienen un escenario bonito. La mayor parte del tiempo, decimos y, afortunadamente, podemos sacar de alguna manera lo que nos guardábamos.
Lo mejor es intentar tranquilizarse. Inhalar y exhalar para tratar de no decir algo en el calor del momento, más que con la intención de lastimar.
3. No pienses lo peor
Si tienes una relación con alguien, es porque le quieres. Le quieres, le aprecias y, por sobre todo, no deseas hacerle pasar un mal rato. Una relación es justo lo opuesto a complicarse la existencia.
No tienes por qué pensar lo peor de tu pareja. Al contrario, esa persona de la que te enamoraste, aún está ahí. Sí, las personas cambian y las situaciones nos ponen en diferentes casos en los que, muchas veces, no sabemos cómo actuar, pero nuestra esencia siempre perdura.
4. Di no a los celos
Los celos no son buenos. En realidad, la desconfianza entre pareja, lo único que atrae es eso mismo: más desconfianza. Deben de aprender a creer el uno en el otro. De otro modo, realmente no tienen nada.
5. Comunicación. Ésa es la clave
Ninguno de los dos es clarividente. Deben decirse lo que piensan, deben compartir sus ideas para que ambos, cada uno con la ayuda del otro, puedan ayudar a entenderse mejor.
Y algo que debemos recordar es que ninguna relación es fácil. Sin embargo, no hay que dejar que un desacuerdo la vuelva imposible. Busca los detalles y, de vez en cuando, hazle sentir especial.