En estos tiempos que corren no sólo padecemos nomofobia: además del teléfono móvil, hay otros gadgets que ocupan nuestra atención: la computadora, la tableta, el lector de e-books, el wearable tech… todos esos artilugios que nos hacen la vida más fácil, también nos distraen de las cosas importantes, como el sexo, de manera que Durex, con su nueva campaña viene a recordarnos que a veces necesitamos desconectarnos.
PUBLICIDAD
Hace poco leíamos en un estudio que los usuarios de smartphones tienen más sexo. Poco después, los resultados de una encuesta revelaron que algunas mujeres prefieren interactuar con su móvil a hacer el amor con sus parejas. ¿Está la tecnología apagando los ardores? Sí y no.
Sí, porque los gadgets son distractores, porque nos hacen quedar ensimismados y, mientras facilitan la comunicación, vuelven artificial el contacto. Pero también son útiles en términos de ligue y romanticismo: los mensajes subidos de tono y la cantidad de medios para propagarlos son una de las grandes virtudes del siglo XXI.
Se trata entonces de buscar un equilibrio. Y, ¡por favor!, de mirar a los ojos al otro cuando lo tenemos en frente, de no tomar el smartphone en cuanto terminamos de hacer el amor, de usar Skype para videoconferencias eróticas entre dos, pero también de tener sexo de verdad (con penetraciones y sexo oral verdadero) en cuanto sea posible.
Este comercial de Durex nos recuerda que ningún aparato será nunca tan efectivo y satisfactorio como el sexo, y se toca aquí el asunto del sexo con amor, lo cual resulta más interesante todavía. Tal vez uno de los anuncios de condones más tiernos y amorosos que hayamos visto. No se lo pierdan. Ah, y pongan atención a la música, lindísimo cover: Fiona O’Kane, “I Can’t Help Myself”.