Cuando pensamos en amor propio creemos que únicamente se centra en dedicarnos tiempo para consentirnos físicamente o encontrar un momento de relajación. Y no. Hay otros actos necesarios para autocuidarse, que son igual o incluso hasta más importantes.
PUBLICIDAD

Así como el cuerpo es valioso porque es nuestro templo, cuidar de la mente, cultivar tus relaciones interpersonales y atender tu estado emocional es igual de crucial para alcanzar el bienestar.
Los actos de amor propio se conforman de cuerpo, alma, mente, emociones y relaciones
Así que cuando todas estas áreas de nuestras vidas encuentran sinergia, verás que te sentirás mejor que nunca.
Alejarte de personas tóxicas
Partiendo del hecho que ya sabemos muy bien cómo amarnos en la órbita del cuerpo, conviene revisar cómo está el apartado de las relaciones con los terceros.
Esto tiene gran influencia en nosotros porque, aunque no nos demos cuenta, nuestro círculo social influye en nuestra toma de decisiones, estado de ánimo, líneas de pensamiento y más.
Así que si quieres ser feliz, es momento de apartarte de personas negativas, malhumoradas, malintencionadas, envidiosas, egoístas o que no vibran contigo.

Aprende cosas nuevas
Nutre a tu mente con temas o actividades que te apasionan y que no habías tenido la oportunidad de probar. Uno de los mayores actos de amor propio que puedes hacer por ti, es vencer el miedo y atreverte a cumplir aquellos sueños, metas u objetivos que te trazaste, que por distintas razones habías dejado atrás.
PUBLICIDAD
Perdónate
¡Qué duro es vivir la vida castigándote por cosas que ya sucedieron! Tal como lo indica, Cultura Colectiva, «demuestras amor propio cuando te das la libertad de sentir tus emociones sin juzgarte», pero poco a poco vas soltando aquello que paso y te hirió.
No lo evadas, vívelo sin ser tan duro contigo mismo, mientras vas entendiendo que esos errores son solo experiencias de aprendizaje.

Practica la introspección
Para cultivar nuestra alma, hay que reflexionar, conocernos a nosotros mismos y tomarse minutos del día para analizarnos y a lo que nos rodea. Hurgar en nuestros sentimientos y emociones, para actuar con base en ello y vivir bien.
«No podemos saber cómo mejorar o en qué dirección ir si no conocemos nuestras inquietudes y nuestros deseos. A veces, vamos tan rápido por la vida, que ni siquiera sabemos qué queremos, cómo lo queremos o lo más importante, qué somos capaces de hacer», afirma el portal Refugio del alma.
Más de este tema:
Cómo romper viejas cadenas de dependencia que te aferran a personas que te hacen daño
Cómo aprender a estar sola y pasar tiempo de calidad contigo misma sin complejos
Señales de que debes terminar una relación de amistad porque te está costando tu paz mental
Te recomendamos en video: