Las setas y hongos son uno de los productos más valorados dentro de la gastronomía y le dan un toque súper elegante a los platos en la cocina.
Entre las grandes cualidades de los alimentos destacan, en primer lugar, su ligereza, ya que se componen entre un 80% y 90 % de agua y no contienen prácticamente ni hidratos de carbono ni grasas.
El único inconveniente con estos productos es que son muy delicados al momento de consumirlos.
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¿La razón? Existen muchas variedades que no son aptas para el consumo humano debido a su toxicidad. Es por eso que lo mejor es documentarse lo mejor posible antes de usar este producto en una comida para evitar posibles complicaciones en el organismo.
Sabrosos aperitivos
Las setas y hongos nos abren un mundo de maravillosas posibilidades para sacar el máximo partido a este genial producto de la naturaleza.
Existen innumerables recetas para sacarles el máximo provecho a las setas y hongos. Acá te presentamos algunas ideas únicas:
– Otra opción es cortar en finas láminas las setas y hongos para comer en crudo y aportar contraste crocante en cada bocado.
– Puedes usar las setas y hongos para elaborar deliciosas cremas, consomés o salteados al dente.
– También puedes elaborar con las setas crujientes bocados o chips a modo de aperitivo o con los que guarnecer otra preparación.
Los más comestibles
Champiñones: Son blancos, de sabor suave, delicado y algo terroso, se pueden comer de muchas formas: crudos, cocidos o en conserva.
Senderillas: Su carne es dulce, de olor a almendras y de color claro, con la ventaja de que no se pudre ni se ve atacada por larvas por lo que se conserva muy bien seco.
Portobellos: A diferencia del champiñón blanco, el portobello es mucho más grande, su sombrero llega a 15 cm y es de color marrón claro. Tiene un sabor intenso, textura más firme, carnosa y muy versátil se usan como acompañamiento o como entrada, crudos, grillados o apenas salteados.
Trufas: Existen de dos colores: blancas y negras y se pueden comer crudas o cocidas, en láminas, en rodajas, en dados, ralladas o en aceite. Se usan en una enorme variedad de platos para darles un toque de distinción.
Gírgolas: También llamados ostras u orejones. Su color varía de gris a pardo y a medida que van madurando se vuelven más amarillentos. Su aroma es fuerte, con textura suave y delicada y en general se comen salteados con arroces y pastas.
¿Cómo prepararlos?
Las setas y hongos representan un alimento de gran valor nutricional, constituyen una importante fuente de carbohidratos, contribuyen a reducir los niveles de colesterol, controlan la presión arterial y fortalecen el sistema inmunológico.
– Las setas tienen la capacidad de absorber y almacenar el agua. Para conservar su sabor, se sugiere entonces usar la menor cantidad posible de agua o no lavarlas.
– Si tienen tierra, límpialas con un cepillo de cerdas suaves o un paño húmedo.
– Los hongos no deben congelarse. La forma ideal de almacenamiento es a una temperatura de 4°C dentro de una cubierta plástica con orificios para que pueda salir el exceso de humedad.
– Las setas cocinadas son más fáciles de digerir, por lo que es recomendable no consumirlas crudas.
– El tiempo de cocción sugerido es de 5 a 10 minutos.
– El período de almacenamiento no debe ser superior a los 10 días, pues de lo contrario comenzarán a perder sus propiedades y vitaminas.
– Las setas y hongos son ideales para elaborar cremas, salsas, ensaladas, como complemento para asados, revueltos, tortillas, rellenos, guisos, platos de caza, arroces y pastas.
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