El magret es una pechuga de pato o ganso, pero debe ser cebado (esta es la diferencia con una pechuga de pato convencional). Se cocina poco, casi solamente sellado, comúnmente al horno para que alcance su punto ideal. Tiene una gruesa capa de grasa que da un delicioso sabor y que incluso puede usarse en lugar de aceite en otras recetas, como unas papas al horno con romero, por ejemplo. ¡Buenísimo!
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Esta carne se lleva bien con sabores ácidos y frutales, su presentación más clásica es a la naranja, aunque existen variantes a la ciruela, el tamarindo, o de plano azúcar. Esta es una versión con frambuesa que no puedes perderte, ¡aprende a prepararla!
Ingredientes
- 700 gr de magret de pato
- 2 chalotas medianas
- 2 zanahoria
- 50 gramos de azúcar
- 2 tazas de caldo de pollo
- 5 cl de vinagre de frambuesa
- 1 taza de frambuesas frescas o congeladas
- 1 taza de jugo de arándano
- un chorrito de licor de frambuesa
- sal y pimienta al gusto
Cómo preparar el pato a la frambuesa
- Corta la grasa del pato en rombos, sin que se despega de la carne
- Pon el pato con la grasa hacia abajo en la fuente de cerámica u olla de hierro forjado
- Corta las chalotas en lunas y ponlas encima del pato
- Hornea a 230°C durante 20 minutos y reserva la carne
- En una olla, carameliza el azúcar y el vinagre; agrega tres o cuatro cucharadas del jugo que soltó el pato y reduce.
- Agrega las frambuesas, reduce un poco más y reserva
- Quita el exceso de grasa de la fuente u olla y ponla a fuego medio, dora ahí la zanahoria rallada, luego agrega el caldo de pollo, el jugo de arándano, sal y pimienta
- Tapa y reduce. Agrega el “caramelo” frambuesa y el licor a la salsa de zanahoria; Reduce hasta obtener una consistencia espesa.
Sirve el pato rebanado acompañado de la salsa y puré de zanahoria o manzanas asadas.
Fuente: Y Pola cocina así