Panamá creó una reserva marina en las aguas del Pacífico, la cual cuenta con 67.742 kilómetros cuadrados, es decir, un área casí tan grande como su superficie terrestre, la cual cuenta con 75.517 kilómetros cuadrados. La reserva está localizada en la Cordillera de Coiba, un punto importante en el encuentro de especies marinas debido a la variedad de alimento hallado en esa región.
PUBLICIDAD
Panamá crea una reserva casi tan grande como el país
Este paso, se realizó con el propósito de cumplir con las metas de protección establecidas en el Convenio sobre la Diversidad Biológica, firmado por 196 países para la conservación y la utilización sostenible de recursos marinos.
La reserva se amplía a 121.341 kilómetros cuadrados debido a que se une a las reservas de Colombia, convirtiéndose en la tercera reserva marina más grande del Pacífico tropical.
Esto se une a los esfuerzos del país para proteger su biodiversidad, ya que en 2015 creó una reserva marina en la cordillera submarina de Coiba para proteger la flora y fauna de 17.223 kilómetros cuadrados.
Pesca ilegal, una de las mayores amenazas
La zona protegida, incluye a nueve cadenas montañosas, donde habitan al menos 14 especies de mamíferos marinos. Es punto de alimentación y reproducción de tortugas marinas, marlines, peces vela, tiburones y ballenas, además de especies en peligro de extinción o vulnerables.
El gobierno de Panamá, está en conversaciones con organismos internacionales para garantizar la protección de la reserva. Se planea proveer al país de herramientas tecnológicas para vigilar la zona, además de la creación de un plan de manejo junto con el Instituto Smithsonian que establece la vigilancia, supervisión y control para el cumplimiento de las limitaciones.
Estudios realizados por los expertos del Smithsonian, muestran que en la zona protegida atraviesan buques mercantiles internacionales, así como naves petroleras y pesqueros internacionales que realizan capturas de atún de manera ilegal.
PUBLICIDAD
Especies como el tiburón también son capturados de forma ilegal, razón por la cual se planea reducir la actividad pesquera en el área y permitir que los recursos puedan llegar hasta zona más cercana a la costa.
La pesca que sí será permitida será selectiva para que no afecte a especies como tiburones y tortugas. Estos esfuerzos permitirán que los recursos se recuperen y se beneficie a las economías locales.
Te recomendamos en video:
Más de este tema:
