Las mujeres no solo enfrentamos la presión de ser profesionales y hermosas para ser consideradas «suficientes», sino que además, debemos encontrar a la persona con la que compartiremos la vida y con quien formemos una familia «antes de que sea tarde».
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La sociedad se ha encargado de hacer que tengamos miedo a no ser de cierta forma o de no alcanzar ciertos logros a cierta edad. Nos ha hecho temer la idea de «estar solas» porque no tener pareja es igual a una condena. Pero también nos ha hecho creer que ser una mujer fuerte es provocar que los demás nos rechacen o nos vean como algo imposible de alcanzar.

¿Te sientes identificada? Todas hemos sido blanco de esta construcción social que sólo nos destruye. Por eso hoy es momento de romper con ello.
Sí, la soledad da miedo, lo desconocido da miedo y también da miedo ver al resto avanzar y sentirte estancada pero ¿sabes qué? Todo cambia cuando aprendes a amarte y abrazar lo que eres en este momento. Cuando te miras al espejo y te dices lo increíble que eres, dejas de pensar en el qué dirán y comienzas a preocuparte por lo que quieres lograr por ti y para ti.
Quizá te cueste creerlo pero has crecido inmensamente.

Has sobrevivido a innumerables tormentas y todavía estás aquí respirando y prosperando. Has sido testigo de numerosas derrotas y fracasos y todavía eres capaz de mantenerte firme y pensar en tu siguiente paso. Te has desmoronado indefinidamente y te has levantado de las cenizas tantas veces cual ave fénix.
Cuando eres una mujer fuerte no permites que la incertidumbre te derrote. Porque aunque tienes miedo, sabes que no es el fin y que siempre habrá una pequeña luz que ilumine tu camino.
La soledad no es algo que te detenga, al contrario, has aprendido a verla como una aliada que te ayuda a crecer.
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Sabes que algunas cosas llevan tiempo y que no se pueden apresurar. Cada quien tiene sus objetivos y cada quien crece a su ritmo. Tu viaje es diferente y eso no te hace menos.
No tienes la obligación de cumplir con las expectativas que los demás tienen de ti. Sabes que es un proceso y que deberías estar orgullosa de cada pequeño logro.

Cuando eres una mujer fuerte, sabes que cada paso cuenta, que eres suficiente y que ni estar acompañada ni estar en pareja te define.
La vida es una montaña rusa con altas y bajas pero ante todo, espero que te des cuenta de que pase lo que pase, eres suficiente. Eres amada y eres todo para alguien. Espero que sepas que siempre puedes empezar de nuevo, fallar y volver a intentar. Espero que veas que estás donde se supone debes estar, que todas las veces que caíste y te levantaste han sido un impulso para convertirte en la mujer fuerte que eres hoy.
Cuando sueltas lo que no pudo ser abres las puertas a lo que bueno que mereces. Cree en el poder de la Ley de Atracción para que hagas llegar el amor y el éxito que tanto anhelas pero sobretodo, cree en ti y lo valiosa que eres para que nadie nunca pueda tumbarte o hacerte dudar.
Hoy más que nunca abraza ese tiempo que tienes contigo misma. Y cuando sientas que te estás perdiendo, cierra los ojos, respira profundamente y visualiza el camino que has recorrido para llegar hasta donde estás. Te darás cuenta de que no cualquiera ha logrado lo que tú has hecho y eso es porque has sido increíblemente fuerte.
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