Cuando llegamos a los 30 años es importante que nuestra rutina de skin care esté bien definida y dirigida a las necesidades específicas que tiene nuestra piel a esta edad. Por eso aquí te presentaremos los pasos que debes seguir para evitar la aparición de patas de gallo.
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Lo primero que debes saber es que una rutina de skin care no solo son las acciones con las que prevenimos las arrugas, sino todos esos productos que aplicamos constantemente para atender las necesidades de nuestro tipo de piel específico.
En este sentido, las rutinas de cuidado de la piel no solo son un método preventivo, sino también, en muchos casos, correctivo de ciertos problemas. Por esta razón, es importante que seamos muy constantes para ver verdaderos resultados.
También es crucial que conozcas qué tipo de piel tienes y cuáles son los problemas que presentas, ya que esto facilitará la selección de productos.
En este caso, nos referiremos específicamente a la prevención de las patas de gallo, así como de otras líneas de expresión.
Cuando llegamos a determinada edad, nuestra piel deja de producir tanto colágeno como cuando somos muy jóvenes, esto facilita la aparición de las conocidas patas de gallo y otras líneas de expresión en el rostro, por lo que debemos tener una buena rutina de cuidado.
Es muy importante comprender que es completamente normal y natural que el rostro tenga líneas de expresión, esto es parte de su proceso.
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Ahora bien, para evitar que estas líneas sean demasiado profundas de forma prematura y existan otras marcas de envejecimiento temprano, es importante que, al llegar a los 30 años, tengamos cuidados específicos que potencien la salud de nuestra piel.
Rutina de skin care para evitar la aparición de patas de gallo
Limpiador para la zona de patas de gallo
Uno de los errores más comunes cuando queremos cuidar nuestra piel es que usamos cualquier tipo de jabón y pensamos que mientras más nos aseamos será mejor.
Es importante encontrar un limpiador que se adapte a tu tipo de piel y que seas específico para la zona de los ojos, ya que esta no solo es más sensible, sino que puedes ser muy difícil de asear cuando nos maquillamos.
Puede ser una leche limpiadora, gel, espuma o tónico, pero procura que sus ingredientes no sean contraproducentes para ti ni para el área de los ojos.
Crema hidratante que se adapte a tu necesidad
Es común que las personas no usen hidratación por temor a generar mucha grasa, sin embargo, esto es uno de los pasos más importantes, pues al mantener una piel hidratada, su elasticidad evita la aparición de arrugas.
Al igual que como ocurre con los limpiadores, no todas las cremas son para todos los tipos de piel. Encuentra esa crema que se adapte a tus necesidades.
Contorno de ojos evita patas de gallo
Los contornos de ojos son cremas que están pensadas especialmente para la sensible piel de esta zona. Aunque algunas cremas hidratantes son de gran ayuda, los contornos evitarán que este tipo de piel se reseque y muchos contienen ingredientes que retardan la aparición de arrugas.
Siempre debes tener cuidado de que el contorno de ojos que escojas no contenga ingredientes no compatibles con tu tipo de piel.
Retinol bajo supervisión dermatológica
La vitamina A o retinol es una sustancia que trae grandes beneficios para la piel, pues es capaz de reducir las arrugas, eliminar las manchas solares, atacar el acné y estimular el colágeno.
Muchos productos contienen este potente ingrediente que es capaz de cambiar mucho la apariencia de la piel, sin embargo, se trata de una sustancia delicada, por lo que es crucial que consultes con tu dermatólogo.
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