Nos encontramos en una receta de algo delicioso para preparar el fin de semana. Están los ingredientes pero falta algo crucial: entender qué significa macerar. Éste u otros conceptos que aparecen en el proceso de las recetas a veces condicionan el entusiasmo, acudiendo a la web para entender de qué de esta hablando.
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Macerar los alimentos. ¿A qué se refiere? Según señala el sitio Directo al Paladar, se trata de de dejar un tiempo determinado un alimento crudo, seco o confitado -aunque también pueden ser hierbas, especias, entre otros- remojando en un licor, aceite, vino o jarabe con el fin de que éste se impregne en el alimento o conservarlo. Un concepto que se atribuye mucho a las frutas.
Por ejemplo, acá el caso de un delicioso salmón macerado con aceite de sésamo y jengibre, ocasión en la que el pescado se disfruta crudo, macerado con estos ingredientes, añadiéndoles toque de sabor para disfrutarlo en su gusto más intenso. Similar es el caso de estas uvas que se fueron al refrigerador previo baño de azúcar flor (o glas) y vino con uva moscatel, todo para terminar siendo un postre irresistible.
Diferente es en caso de marinar los alimentos. Esta acción tiene que ver con un proceso similar, pero el líquido es más condimentado, como en el caso de este pollo al ajo, donde los cortes se llevan a una fuente donde hay aceite, ajo, sal, vinagre, tomillo y pimienta. En la receta anterior, el pollo se marina por 30 minutos, aunque hay otras preparaciones que exigen más tiempo, como esta donde la marinada es de 3 horas a 1 día.
Marinando los alimentos -verduras, pescado o carnes- consigues que estos estén más tiernos, suavizas los sabores y consigues que el aroma de la marinada traspase el alimento con éxito. ¡Qué maravilla de técnica!
Ambas son técnicas que empleamos en las recetas y que esperamos estén más claras. El objetivo es que nos familiaricemos con las preparaciones y que cada día le tomemos más cariño al noble arte de la cocina.
Fuente: Directo al Paladar
