Jason Momoa estrenó Sweet Girl y le dio un giro a los personajes a los que estamos acostumbrados a ver para convertirse en Ray Cooper, un hombre de familia que busca vengar la muerte de su esposa mientras intenta proteger a su hija.
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El drama de acción fue estrenado el pasado 20 de agosto por Netflix el filme que esperaban ansiosos los fans de Momoa.
El gigante de streaming ha sumado de poco grandes actores quedándose por lo que no tiene nada que envidiarle al cine en cuanto a los grandes estrenos.
Netflix ha invertido fortunas para tener éxito en las taquillas sin debutar en las grandes pantallas, un ejemplo de esto es Sweet Girl.
Jason Momoa y su nueva faceta actoral
El actor dejó atrás a Aquaman, Khal Drogo y Conan el Bárbaro para mostrar una nueva faceta actoral junto a Isabella Merced (Rachel) quien figuró como su hija y Adria Arjona (Amanda) como su esposa, quien muere de cáncer.
Como padre que es en la vida real no se le hizo complicado el personaje por lo que logró mover las fibras de los espectadores al dejarse ver como un hombre humilde de gran corazón que en medio del dolor busca venganza.
En sus producciones hemos visto a un hombre muy fuerte, capaz de arrojar personas por el aire, golpear con furia y derribar obstáculos, sin embargo, en esta oportunidad vemos una nueva versión, sin dejar a un lado la acción.
¿De qué trata Sweet Girl?
Si bien el cáncer de Amnda es agresivo, tenía una oportunidad de luchar por su vida con el medicamento Spero.
Sin embargo, la compañía farmacéutica BioPrime, encargada de la distribución liderada por Simon Keeley (Justin Bartha), decide inesperadamente retirar el medicamento del mercado, dejando sin oportunidades a Amanda.
Su muerte lleva a Ray a una venganza en contra de la compañía, quien busca dejar al descubierto los intereses políticos y económicos que están detrás de la decisión que condenaba a miles de personas.
La empresa se escuda asegurando que la alta inversión en investigación y desarrollo es la razón de su decisión.
Mientras busca justicia pone en riesgo su integridad y la de su hija Rachel, por lo que su lucha cambia de giro para salvar a su única familia.
Finalmente, padre e hija logran desenmascarar a la industria farmacéutica y exponer la corrupción.
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